Por qué a todo el mundo le preocupa la reina Letizia

Si algo nos está dejando claro este 2024 es que los ‘royals’ también enferman. Con los diagnósticos de cáncer del rey Carlos III, Kate Middleton y Sarah Ferguson, la Casa Real británica es la que más atención mediática ha recibido en los últimos meses, pero no la única que se ha visto afectada últimamente por los problemas de salud de alguno de sus integrantes. 

Si hacemos un repaso rápido por las monarquías internacionales, salen a la palestra varios nombres propios, como la emperatriz Masako de Japón, que padece depresión crónica; Mette-Marit de Noruega, aquejada de fibrosis pulmonar desde 2018, y su suegro el rey Harald V de Noruega, que ha pasado dos meses de baja por una complicación respiratoria; o Charlène de Mónaco, quien en 2021 entró al quirófano hasta en tres ocasiones a causa de una infección otorrinolaringológica.

Los problemas de salud de la monarquía española 

La Casa Real española tampoco se ha librado de estos baches de salud. El rey Felipe acabó el 2023 con una férula en la muñeca izquierda tras lesionarse jugando al pádel; en febrero, la infanta Elena tuvo que llevar una bota ortopédica en el pie izquierdo; y en abril la reina emérita doña Sofía sufrió una infección del tracto urinario que la mantuvo hospitalizada en la clínica Ruber de Madrid durante varios días. 

La última en caer en desgracia ha sido la reina Letizia, cuyos dolores de pies han protagonizado titulares incluso en la prensa internacional. 

¿Tendrá que pasar por quirófano la reina Letizia?

Se ha llegado a especular con la posibilidad de que doña Letizia tenga que someterse a una intervención quirúrgica próximamente. La información surgió a raíz del comentado encuentro de la consorte con Belén Esteban en un acto oficial; pero desde Zarzuela no tardaron en desmentirla: “No es cierto que Su Majestad la Reina vaya a ser operada de la fractura que sufre en un pie”, explicaron.

Su fractura en el pie por un accidente doméstico

El rumor viene a colación de sus problemas en la falange proximal del dedo corazón del pie derecho, que se fracturó al darse un golpe contra una mesa en su residencia. 

Según ha trascendido, la reina aguantó varios días con el pie amoratado e hinchado, pero, como el dolor no remitía, le hicieron una radiografía que mostró la mencionada rotura, motivo por el que desde el pasado 6 de mayo la hemos visto siempre en zapatillas o, como mucho, con unas bailarinas planas.

Su metatarsalgia y su neuroma de Morton

Sin embargo, esta fractura no es el único foco de problemas en sus pies, en los que padece dos dolencias desde hace tiempo: la metatarsalgia que padece de forma crónica y el neuroma de Morton que le diagnosticaron hace más de un año. Ambas complicaciones están relacionadas con el uso de ‘stilettos’, motivo por el que en este tiempo ha ido rebajando la altura de sus tacones hasta llegar a un modelo moderado mucho más confortable, el cual ahora ha tenido que reemplazar por el calzado ‘barefoot’ para favorecer su recuperación. 

El dolor de la reina Letizia y su leve cojera

Pese a su lesión, doña Letizia no ha bajado su ritmo de trabajo, algo que podría haberle pasado factura. Lo vimos, sobre todo, a su llegada a Guatemala, cuando no pudo disimular una leve cojeraal bajar del avión para iniciar su viaje de cooperación. 

Por todo ello la salud de la reina Letizia ha generado una gran preocupación entre expertos en realeza y seguidores de su estilo, que esperan verla recuperada muy pronto.