Los cinco pueblos con los hoteles más románticos de España

Si buscas el plan perfecto con tu pareja, a veces, lo único que necesitas, es escapar del mundo. A lo largo y ancho de nuestro país, encontramos una infinidad de rincones mágicos en los que manda la naturaleza y el tiempo se detiene. Si a eso le sumas las comodidades propias de un hotel de lujo, el resultado es la espada perfecta. Casas medievales y antiguos caserones restaurados o fincas en enclaves idílicos nos invitan a pasar (como mínimo) un fin de semana de ensueño. Toma nota porque estos son los cinco pueblos en los que se ubican algunos de los hoteles más románticos de España.

Casa Taberna, en Pedraza (Guadalajara)

La Plaza Mayor de este pueblo medieval acoge a esta casona del siglo XVII que recupera su antigua taberna, convertida ahora en restaurante y se transforma en ‘casa de huéspedes’. Tras ella se encuentra Samantha Vallejo-Nájera, toda una garantía. Con una decoración impecable, cada espacio transmite la historia del lugar y cada detalle está cuidado al máximo: en sus habitaciones se mezcla el espíritu clásico con los toques rústicos castellanos. Además, si tienes pensado ir, te recomendamos que valores visitarla en julio, cuando se celebra la famosa ‘Noche de las velas’ de la localidad.

(Plaza Mayor 3, Pedraza, Segovia. Tel. 621 25 90 16)

La Casa de los Tomillares, en Candeleda (Ávila)

En este precioso rincón, ubicado a los pies de la Sierra de Gredos, su propietaria –anticuaria y decoradora desde hace 22 años– ha sabido reinterpretar el lujo para crear la casa de campo perfecta, a la que ha dotado, además, con todas las comodidades de un gran hotel. Cada una de sus siete habitaciones están decoradas de forma diferente y, en sus jardines puedes desde disfrutar de un picnic (tienes la opción de pedir que te lo preparen) hasta bañarte en su imponente piscina, con vistas a las montañas.

(Ctra. Candeleda-Oropesa / AV-910, Km5, Candeleda, Ávila. Tel. 920 38 23 77)

Casa El Bálsamo, en Belmonte (Cuenca)

En el siglo XVI fue una casa solariega, y ha sido restaurada y decorada, cuidando cada espacio, con la idea de que vivas una experiencia única. Se encuentra, además, en un entorno privilegiado ya que, dentro del propio hotel, cuentan con dos cuevas centenarias, excavadas en su día a golpe de cincel en la roca del terreno. Hoy, una es una piscina termal (de la que, por supuesto, puedes disfrutar) y la otra es una pintoresca alacena. Cuenta con siete habitaciones y dos apartamentos.

(C. Alcalde Antonio Vellisco, 14, Belmonte, Cuenca. Tel. 645 08 18 44) 

Casa Alba, en Benissa (Alicante)

Dos jóvenes holandeses han dado vida a este refugio en el que el estilo mediterráneo se funde con el más absoluto minimalismo. Ubicada en la comarca de Marina Alta, aquí, todo va a otro ritmo porque cada rincón está especialmente ideado para que el tiempo se detenga. Está formada por cuatro habitaciones y, además, si las reservas todas, puedes personalizar tu estancia con clases de cocina o catas de vino.

(Partida Collado 25-B, Benissa, Alicante. Tel. 722 88 65 52)

Caserío de Aldeallana, en Valdeprados (Segovia)

Este antiguo caserío, de 1800, combina hoy la arquitectura tradicional de la zona con las comodidades propias de un ‘Bed&Breakfast’ de lujo. Su propietaria, Rocío, se ha esforzado en rescatar piezas de desvanes y almonedas para dotar de alma a este hotel en mitad de la naturaleza que refleja a la perfección ese nuevo estilo ‘agrochic’ que no deja de ganar adeptos. Tiene cinco habitaciones, cada una completamente diferente, además de un bonito patio lleno de jazmines en el que, sin duda, podrás desconectar de todo.

(N-110, Km. 210,5, Valdeprados, Segovia. Tel. 689 41 46 52)