Cinco pueblos preciosos y cerca de Madrid para una escapada de última hora
Si se te ha echado el tiempo encima y aún no tienes preparado tu viaje de Semana Santa, no hace falta que salgas de España ni que te vayas muy lejos, aquí tienes cinco destinos ideales y a poco más de una hora de la capital.
La Semana Santa está a la vuelta de la esquina y, si todavía no tienes tu viaje o cuentas con pocos días para disfrutar de estas pequeñas vacaciones, salir de la ciudad y desconectar... No te preocupes porque no es necesario que te vayas muy lejos. Cerca de Madrid hay una infinidad de pueblos –muchos de ellos realmente idílicos– que merece la pena visitar. Localidades llenas de encanto, con calles empedradas, monumentos medievales o una naturaleza envidiable que se encuentran entre las más bonitas de España. ¿Lo mejor? Tardarás, aproximadamente, una hora en llegar.
Patones de Arriba
Es uno de los pueblos más bonitos y espectaculares de España, se encuentra al norte de la Comunidad de Madrid. Su paisaje es realmente idílico, parece sacado directamente de un cuento. Es famoso por su ‘arquitectura negra’, denominada así porque sus casas están hechas principalmente de pizarra, lo que les concede esa apariencia oscura. Su historia es muy curiosa ya que, en el siglo XVII contaba hasta con su propio Rey: el Rey de Patones, al que llamaba así incluso el mismísimo Carlos III. Te recomendamos visitar el ecomuseo de la Pizarra, declarado como Bien de Interés Cultural. Además, cuenta con la máxima protección de la ley de Patrimonio Histórico Español y, entre otras cosas, los coches tienen prohibida la entrada. Por eso está tan bien conservado.
Brihuega
También conocido como ‘el pueblo de la lavanda’, está ubicado en el valle del río Tajuña y no tiene nada que envidiar a cualquier enclave de la Provenza. En este municipio se mezclan naturaleza e historia. Por un lado, su arquitectura medieval cuenta con enclaves como el castillo de la Peña Bermeja, de finales del siglo XI, la Real Fábrica de Paños, mandada construir por el rey Fernando VI e, incluso, cuenta con uno de los cementerios más bonitos de España. Tiene, además, numerosas fuentes, como la fuente de los Doce Caños o fuente Blanquina.
Además, este municipio hará las delicias de todos los amantes de la literatura pues, otro de sus grandes puntos de interés es el mirador de Hemingway, llamado así en honor al escritor Ernest Hemingway, que observaba desde allí los combates en 1936 entre las tropas italianas y las de la República cuando ejercía como corresponsal de guerra. Los cinéfilos también encontrarán su encanto pues ha sido escenario de películas como 'La tía Tula' (Miguel Picazo, 1964) o 'Hable con ella' (Pedro Almodóvar, 2001).
Eso sí, tienes que tener en cuenta que los campos de lavanda (situados a pocos kilómetros de la ciudad) florecen en la segunda quincena de julio, y este es un espectáculo digno de verse.
Buitrago de Lozoya
Se encuentra a los pies del puerto de Somosierra, en plena Sierra de Guadarrama, y tiene el honor de ser el único pueblo madrileño con un recinto amurallado completo. Si paseamos por la zona norte de la muralla, lo haremos junto al río Lozoya, mientras que al sur, se ven algunas de las fortalezas que protegían al pueblo. Merece la pena que no dejes de ver la Torre del Reloj y el castillo de la Familia Mendoza pero, sin duda, lo más llamativo es la iglesia Santa María del Castillo, también conocida como la ‘Iglesia de las Tres Culturas’ ya que en su interior en su interior encontramos referencias a la religión judía, musulmana y cristiana, que convivieron durante siglos en la villa. También encontrarás el Museo Picasso, con obras que el artista regaló a su gran amigo, Eugenio Arias, durante su exilio en Francia.
La Hiruela
Este municipio es un destino perfecto para visitar en un día. Lo encontramos en medio de la Sierra del Rincón, un espacio natural al noreste de la comunidad declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Su magia se la otorgan las pequeñas casitas de piedra, adobe y madera que dan vida a sus calles, que muestran casi el mismo aspecto que el que lucían a mediados del siglo XVIII. Además de un paseo idílico –en el que te parecerá que realmente has viajado en el tiempo–, puedes visitar el tradicional colmenar, el molino harinero, la carbonera que produjo carbón vegetal de roble hasta mediados del siglo XX o el Museo Etnológico.
Además, en sus alrededores podrás perderte en lugares con una naturaleza única y de una belleza inigualable, como las sendas de Las Eras y Pila de Riego, en las que encontrarás varios miradores con unas vistas espectaculares.
Nuevo Baztán
En la región natural de los Páramos, se ubica Nuevo Baztán. Su nombre se lo debe al pueblo del Baztán (famoso por la ‘Trilogía del Baztán), en Navarra, ya que su fundador, Juan de Goyeneche y Gastón, era originario de allí. Nació a principios del siglo XVIII y el diseño urbano es obra de José Benito de Churriguera (creador, junto a sus hermanos, del famoso estilo Barroco llamado ‘churrigueresco’), así que, no es de extrañar que fuera nombrado Monumento Histórico Artístico en 1941. El casco antiguo conserva todo el encanto de sus orígenes, lleno de casas antiguas y donde encontramos desde la plaza de la Iglesia al Palacio-Iglesia de Goyeneche, un edificio monumental que fue la residencia del fundador. Nació como una ciudad industrial, por lo que también cuenta con numerosas fábricas, como la de Vidrio y la de Paños. La primavera es una época perfecta para visitar esta localidad, con los árboles en flor.
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