La reina Letizia estrena en Zaragoza, cuatro años después, el vestido de volantes más romántico del verano

Desde el día que su hija comenzó su carrera militar, hace casi un año, la reina Letizia ha estado muy presente en los grandes momentos de la princesa Leonor. Por eso este jueves no podía perderse la entrega de Reales Despachos celebrada en la AGM de Zaragoza, un acto con el que la princesa de Asturias pone el broche de oro a su primer curso de instrucción y pasa a ser oficialmente dama alférez cadete del Ejército de Tierra. 

El rey Felipe VI, que, recordemos, es además el capitán general de los tres ejércitos, ha sido el encargado de entregarle este título a la heredera, quien también ha recibido de manos de su padre la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco. 

El look de estreno de la reina Letizia

Como es habitual en este tipo de citas, tanto la reina Letizia como la infanta Sofía, ambas sin formación militar, se han mantenido en un discreto segundo plano. Pero no en cuestiones de moda, ya que, con la princesa vestida de uniforme, todo el peso estilístico del acto ha recaído sobre ellas dos.

La benjamina de la familia se ha decantado por un vestido de rayas de Hugo Boss que ya le conocíamos y que incluye un mensaje oculto dirigido a su hermana; en cambio, la consorte ha decidido estrenar un vestido de Maje, una de sus firmas francesas preferidas.

Con volantes, nido de abeja en la cintura y estampado de flores, el look resulta perfecto para el verano; pero no lo busques en la web de la marca: pertenece a la colección de 2020, por lo que es posible que llevara estos cuatro años colgado en su armario con la etiqueta puesta, esperando a que su estilista encontrara la ocasión perfecta para estrenarlo (al menos de cara al público). En su momento la pieza tenía un precio de 350 euros, aunque en rebajas llegó a quedarse en 245 euros.

Doña Letizia lo ha combinado con unos pendientes florales de la diseñadora mallorquina Helena Nicolau que hacía mucho tiempo que no sacaba de su joyero y que le sientan de maravilla. No ha faltado tampoco su inseparable anillo grabado de Corterno.

A los pies, la reina ha vuelto a confiar en las sandalias joya de Pedro García que estrenó la semana pasada durante un acto de la FAD con Netflix. Realizadas en napa de cordero, cuentan con cinco tiras de satén adornadas con cristal, y una planta anatómica de goma, perfecta en estos momentos debido a su lesión en el pie derecho. Su precio es de 450 euros.

Con este evento la princesa Leonor se despide definitivamente de la Academia General de Zaragoza, el lugar que se ha convertido en su casa en los últimos once meses y donde ha forjado relaciones y amistades que guardará para siempre. Ahora podrá disfrutar de unos días de vacaciones (ya ha estado con sus amigos en las fiestas patronales de Jaca), aunque tendrá que compaginarlas con sus deberes institucionales (ya tiene previstos varios compromisos, entre los que se incluyen su primer viaje oficial al extranjero en solitario y la ceremonia de entrega de los Premios Fundación Princesa de Girona). En el mes de agosto retomará su formación militar, esta vez desde la Escuela Naval Militar de Marín (Pontevedra), donde sus padres y su hermana seguirán siendo un apoyo fundamental para ella.