La mudanza a Zarzuela de Irene, Miguel y Juan Urdangarín: ¿por qué la Casa Real guarda silencio?

Se dice que una de las grandes ilusiones de la reina emérita cada verano es reunir a sus tres hijos y a todos sus nietos en el Palacio de Marivent. Doña Sofía siempre tiene las puertas de su casa abiertas para la familia y, aunque hace varios años que no logra (al menos de cara al público) juntarlos a todos en la residencia de verano de Mallorca como le gustaría, poco a poco muchos de sus nietos están recurriendo a ella cuando buscan refugio en Madrid. 

Se dice que Victoria Federica pasaba algunas noches allí, pero la primera en instalarse de forma oficial fue Irene Urdangarin hace aproximadamente un año; poco después siguió sus pasos su hermano Miguel y, ahora, también el mayor, Juan, ha solicitado las llaves de Zarzuela para iniciar una nueva etapa y dejar atrás su antigua vida en Londres.

De esta forma, tres de los cuatro hijos de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina pasarán una temporada en la vivienda habitual de los Borbón, ejerciendo como ‘compañeros de piso’ de doña Sofía y su hermana, Irene de Grecia. Eso sí, será por poco tiempo, porque la benjamina de los Urdangarin pondrá tierra de por medio dentro de poco para iniciar su carrera en Londres, en una de las universidades más prestigiosas del mundo.

La infanta Cristina, “desbordada”

Según publica Monarquía Confidencial, esta situación le ha generado una gran preocupación a la infanta Cristina, que se ha visto “desbordada” y “al límite” por la inestabilidad de sus hijos a nivel académico y laboral. Al fin y al cabo, Irene acaba de regresar de su voluntariado en Camboya, Miguel está haciendo unas prácticas y Juan ha decidido tomarse un año sabático.

El único que tiene claro su camino y lleva una vida independiente es Pablo, que vive en Barcelona con su novia, Johanna Zott, y se dedica de manera profesional al balonmano, tal como hizo su padre de joven.

La respuesta de la Casa Real

El citado medio asegura que tanto Felipe VI como doña Letizia estarían de acuerdo con la mudanza de sus sobrinos a Zarzuela. Pese a que en el pasado han estado más distanciados, parece que en el último tiempo el rey ha acercado posturas con sus hermanas y, de acuerdo con las fuentes consultadas por el mencionado portal, ahora que ha regresado de sus vacaciones privadas el monarca ha autorizado a sus sobrinos para instalarse en la residencia real.

No obstante, a nivel oficial no se ha producido ninguna declaración y desde la Casa Real guardan silencio respecto a la situación de los jóvenes Urdangarin. Hay que recordar que estos no forman parte de la familia real como tal, sino que son considerados solamente parientes del rey y sus asuntos, por tanto, no atañen directamente a la corona.