¿Es la coloración ácida la revolución capilar que esperábamos?
Últimamente se oye hablar mucho de la coloración ácida. Lleva algún tiempo entre nosotros, pero está ganando popularidad y despertando el interés por ser más considerada con la salud y la belleza del pelo: promete color y tratamiento, con un resultado glossy. ¿Cumple las expectativas?
Teñirse el pelo ya no es lo que era. Primero, porque ya no solo es una estrategia antiaging para disimular las canas, sino porque es una cuestión de moda así como un poderoso elemento de autoexpresión. Y a medida que ha ido bajando la edad de las usuarias (y usuarios) e incrementando su número, la industria ha puesto toda la carne en el asador para ofrecer unas soluciones mejoradas para mantener, en la medida de lo posible, la salud capilar. Nos gusta jugar con el aspecto de nuestro pelo, y el color forma parte de ese juego, pero a diferencia del corte o el peinado, teñirse implica agredir y transformar la naturaleza de nuestra melena. Aun así 8 de cada 10 mujeres recurren a la coloración capilar.
Nuestro pelo y nuestro cuero cabelludo tienen naturalmente un pH ácido (entre 4 y 5,5), y precisamente esa acidez es la responsable del sellado de las escamas del cabello, protegiéndolo de las agresiones. Pero… cuando teñimos el pelo lo habitual es abrir químicamente esas escamas con un producto alcalino para dejar pasar al interior los pigmentos. Y el amoníaco, con un nivel de alcalinidad de 11, ha sido tradicionalmente la llave para abrir esa puerta al tinte. Ese es el principio de la coloración permanente: alcalinizar la fibra capilar, un proceso que tiene sus implicaciones: el pelo se vuelve más poroso, seco, opaco y quebradizo, cuesta más desenredarlo y se nota más áspero al tacto.
Sin duda la coloración alcalina convencional sigue siendo la favorita para muchas mujeres, sobre todo a la hora de cubrir canas, en la medida que es más efectiva y duradera, pero el brillo y el equilibrio de nuestra melena también merece evaluar otras alternativas. Y es en este contexto donde se posiciona, cada día con más fuerza, la coloración ácida. Algo más considerada con la fibra capilar. Y decir esto es mucho.
“El cliente cada vez es más exigente. Por eso, la coloración ácida es uno de los servicios más demandados en los salones de peluquería. Y no es para menos, ya que ofrece color y tratamiento al mismo tiempo”, comenta Gema Manzano, Hair Expert en Montibello. Quique Sánchez, director creativo de Espacio Q y Q-01, confirma la creciente popularidad de este tipo de coloración, “y en parte es gracias al auge de la búsqueda de las clientas por productos libres de químicos, que cuiden su cabello, que lo nutran, que lo hidraten. Esta nueva tendencia de optar por productos más naturales y orgánicos hace que este tipo de coloraciones sean más demandadas”.
El secreto de la coloración ácida
Lo dicho, la clave de este tipo de coloración es que cuida el pelo desde dentro: lo nutre, hidrata y protege. Frente a la coloración alcalina o permanente que utiliza una reacción química para aclarar la melanina natural y permitir que el pigmento del tinte se deposite en el interior, la coloración ácida, expone la portavoz de Montibello permite aplicar color de una forma más suave, confortable y respetuosa, sin generar un proceso degenerativo en el cabello. “Esto es debido a que el pigmento se deposita sobre el pelo, sin modificar la melanina natural, consiguiendo un resultado más natural y sin efecto raíz”. Esto tiene su contrapartida y es que mientras la coloración permanente solo se puede eliminar dejando crecer el cabello y cortándolo, la coloración ácida dura menos y desaparece a los 20-25 lavados. Y esto, aunque a priori parezca una desventaja, puede ser uno de sus puntos fuertes; ya que como sentencia Manzano es un color sin compromiso.
Para Quique Sánchez, otro dato importante de la coloración ácida es que ayuda a restaurar las fibras del cabello haciendo así que sea mas fácil recuperar el brillo y la hidratación. Pero, dice, son coloraciones que funcionan en todos los caso, ya que no tienen tanta capacidad de cubrir las canas.
¿Eres candidata a la coloración ácida?
Según Gema Manzano, este tipo de coloración es idónea para quienes deseen introducirse en el mundo de la coloración, ya que no crea efecto raíz, o disimular las primeras canas. También es adecuada tanto profundizar el color como para cambiar de reflejo, así como para las personas que no desean color, pero sí beneficiarse de la parte de tratamiento y de los resultados en cuanto a brillo. Asimismo, para esta experta, resulta también perfecta para quienes se aplican color permanente en raíz y quieren refrescar o mejorar el color y, al mismo tiempo, recuperar la calidad de la fibra capilar. Del mismo modo, en cabellos decolorados y aclarados con coloraciones permanentes, sirve para neutralizar, tonalizar o intensificar el tono.
Por otro lado, Quique Sánchez aconseja especialmente este tipo de coloración para aquellas personas que prefieren optar por productos de origen más natural, orgánico e incluso vegano, así como para quienes tienen un cabello muy dañado o poroso.
Sin embargo, si tu melena es muy oscura y pretendes irte al lado de las rubias, la coloración ácida, al no aclarar el cabello solo podrá aportar brillo sin percibirse el color, comenta Gema Manzano. Tampoco es la mejor opción si odias tus canas profundamente y con solo verte un pelo gris te pones de los nervios. Aunque, como puntualiza Manzano, incluso en estos casos puede considerarse para corregir tonos indeseados y matizar la cana. “La coloración ácida es una buena opción entre servicios de coloración tradicional para mantener el color y el brillo siempre vibrantes”.
Por último, y aunque es de sentido común, mantener el brillo y el color en su mejor estado requiere una rutina de cuidados en casa. “Un champú y acondicionador específicos para mantener el color pueden ser ideales. Y una vez por semana aplicar una mascarilla durante 30 minutos que nos aporte más hidratación”, establece Sánchez
Síguele la pista
Lo último