La tienda de Zara más grande del mundo como nadie te la ha enseñado

Zara lo ha vuelto a hacer. Cuando pensábamos que era imposible que Inditex nos sorprendiera (otra vez), Amancio Ortega ha abierto una nueva tienda en Madrid en el Paseo de la Castellana, 79.

La gente se agolpaba en la cola antes de la inauguración, a la espera de que las puertas del Zara más grande del mundo abrieran a las 10 de la mañana. Cuatro plantas de moda 'low-cost', dos dedicadas a mujer, una a niños y una hombre y todas, con colecciones especiales y solo disponibles en Castellana 79 (ni online ni en otras tiendas), son las piezas claves que podrás encontrar en el nuevo espacio. 

Una colección de velas -con algunas fragancias ya agotadas- exclusiva para la tienda (y customizada), zapatos, bolsos y la colección 'Studio' del catálogo al completo son (algunas) de las excusas que te llevarán a Castellana, solo para comprar en Zara, como han hecho muchos de los que se han acercado esta mañana a la tienda. 

Bajo la insignia ecológica y sostenible, este Zara es el más responsable con el medioambiente. Los gastos de luz se reducirán en un 20% (todas las bombillas son led) y los de agua en un 40%, las perchas se reciclarán y además, con los retales de temporadas pasadas, se ha creado un nuevo tejido, llamado 'lyoncell' que es totalmente ecológico y que tiene presencia en todas las colecciones en prendas seleccionadas. 

180 empleados se reparten en el nuevo espacio, que ha sido pensado estratégicamente para el cliente. Con cuatro entradas, que dan a diferentes puntos de la zona, el diseño de los probadores es fruto de la logística más estudiada (al igual que el almacén): en forma de pasillo, la entrada está al principio y a la salida nos encontramos directamente las cajas, para que no haya pérdida y que se cree un recorrido que lleve desde la entrada de la tienda -pasando por todas las colecciones-, hasta los probadores y finalmente a hacer el 'check-out'. 

Con esta inciativa, Zara pretende cerrar el círculo y producir, pero también reciclar, ya que pondrá a disposición de los clientes contenedores para depositar sus antiguas prendas. Lo que se quiere, es crear un cíclo de vida para las piezas y que tengan un principio y un final sostenible. 

Hasta ahora, esta es la tienda más grande de Inditex (6.000 metros cuadrados) y se convertirá en el espacio de referencia de la cadena, en lo que es una de las apuestas más arriesgadas que se han llevado a cabo hasta el momento: la zona no se sitúa en un punto estratégico ya que, ubicada junto a los edificios de oficinas de Castellana y junto al Corte Inglés, el tráfico de gente no es tan fluido como en Serrano o Gran Vía.

Mucho más estructurado, más luminoso y con las colecciones segmentadas por bloques -por lo tanto, mucho más visual-, el nuevo Zara es una apuesta y un modelo a seguir, ya que los próximos establecimientos que se abran se construirán en la misma línea y se espera, que con las mismas dimensiones.

Zara no se esperaba una acogida y una repercusión tan grande, pero como siempre, -y como pasa con sus prendas virales- nos ha cogido a todos por sorpresa.