A cada selfie una personalidad. ¿Cuál es la tuya?

No lo niegues. Tú también has caído en la tentación del 'selfie'. Porque en una sociedad en el que las redes sociales están a la orden del día, el 'selfie' es un etapa por la que todos pasamos. Algunos se quedan anclados, como Kim Kardashian, otros la pasan "de vez en cuando". Pero nadie escapa de la foto que más abunda en Instagram. Recientemente un estudio mostró que dedicábamos más de una hora a la semana a capturar nuestro rostro. 

En los comienzos de la 'autofoto', todo el mundo pensó que no era más que una instantánea narcisista que solo se hacían aquellos que tenían confianza plena en su belleza. Pero para nada. Pues también ha servido para que las celebrities, por ejemplo, nos muestren rostros sin maquillar. Porque no solo de 'selfies' perfectos vive Instagram. Pero, ¿qué nos lleva a hacernos una foto a nosotros mismos?

La Universidad de Brigham Young ha elaborado un estudio en el que divide los ‘selfies’ en tres categorías. Y en cada una de ellas, una personalidad. Porque aunque esta foto haya evolucionado hacia muchas vertientes, todo se reduce a tres tipos. 

Selfies comunicadores

Aquellos que se comparten con el objetivo de iniciar una conversación con sus seguidores. Por ejemplo, como si le preguntarás a tu mejor amiga si te queda bien la barra de labios azul que tanto se lleva. Prepárate para recibir respuestas de todo tipo. Son los más sociables.

Selfies Autobiográficos

Los que comparten su día a día. Eso de escribir un diario no les emociona lo suficiente, por lo que dejan en una foto sus momentos del día. La soledad no va contigo.

Selfie Autopublicitario

Aquí encontraríamos esos que te haces cuando te levantas, te miras al espejo y tienes un algo especial que te hace estar radiante. Vamos, cuando te encuentras estupenda y quieres gritarlo a los cuatro vientos. Lo tuyo es seguridad.