Los errores más habituales que debes evitar antes de hacerte la micropigmentación de cejas

La micropigmentación es una especialidad enmarcada en el campo de la estética cada vez más popular, sin embargo, sigue siendo una gran desconocida para la sociedad. Sobre todo en lo que a preparación y cuidados posteriores se refiere. Hablamos de una técnica que se encarga de realzar la belleza natural, modificar y corregir imperfecciones o ciertos rasgos faciales de la forma más sutil posible como por ejemplo las cejas, quizás la más popular. Precisamente, este procedimiento está indicado para aquellos rostros que tenga cejas poco pobladas, estrechas o cortas y que tengan como objetivo corregir esas asimetrías y armonizar el rostro.

Si bien sabemos que la duración, en términos generales, es de dos o tres años, las dudas en torno a su procedimiento o a cómo debemos llevar a cabo esta técnica siguen siendo innumerables, debido en gran parte a las falsas creencias que se han extendido en los últimos años en redes sociales o incitadas por rostros inexpertos.

Los cinco errores más habituales de la micropigmentación de cejas

La especialista Mónica Aránguez nos explica los cinco errores que son más habituales y que debemos evitar a la hora de someternos a un tratamiento de micropigmentación de cejas.

• No elegir a un/a especialista con experiencia

Si bien la micropigmentación es una técnica no invasiva con la que podemos obtener resultados casi inmediatos, debemos consultar la experiencia de los especialistas antes de pasar por su consulta para asegurarnos los resultados deseados. No dejarnos llevar por lo que otros nos cuenten o lo que leamos en redes sociales, que no siempre tienen la información correcta o la que realmente se adapte a nuestras necesidades. Para ello, Aránguez recomienda ver sus trabajos anteriores y sus cicatrizados, así cómo la evolución de sus pacientes con el paso del tiempo para poder estar 100% seguros de la elección.

• No estudiar bien el diseño de las cejas

Bien es sabido que no todas las cejas son iguales, por lo que si hablamos de la micropigmentación de cejas, "es esencial consultar el diseño de manera previa a realizar el procedimiento y confirmar cuál es la forma que más encaja en nuestro rostro buscando la armonía facial", tal y como apunta la especialista en cejas. Para ello, la recomendación es realizar siempre un diseño previo, comprobar que es simétrico (ya que el rostro no es simétrico, por lo que el diseño no puede ser idéntico para ambas cejas) y que realmente encaja con los resultados deseados.

También, en cuanto al microblading en cejas es esencial elegir cuidadosamente la técnica que más nos va a favorecer según la estructura y densidad del pelo, así como el tipo de piel. Estos factores determinarán que con el tiempo la micropigmentación se degrade de una manera u otra.

• No dar con el color adecuado

A la hora de elegir el color, Mónica aconseja no utilizar colores demasiado oscuros en cejas y en labios, aunque en estos momentos los tonos oscuros o las cejas muy pobladas y marcadas sean máxima tendencia. El motivo principal es que con el paso del tiempo se degrada peor y los resultados no son los deseados.

• Apostar siempre por el 'eyeliner'

Antes de hacernos un 'eyeliner cat eye' debemos estudiar la forma de nuestro ojo. Por ejemplo, "no se recomienda optar por diseños de eyeliner largos y anchos si se tiene un ojo encapotado o con poco espacio en la cuenca del ojo porque el efecto que conseguiremos será el de una mirada más triste", señala.

• Olvidarnos del maquillaje

La micropigmentación nos permite embellecer nuestro rostro sin necesidad de recurrir al maquillaje tradicional, pero no sustituye a este ni los resultados son los mismos. Por otro lado, el microblading persigue un resultado más natural, y no puede lograr la misma intensidad que un maquillaje recién hecho en las cejas o en los ojos.