¿Puede la Alta Costura marcar tendencia?

Spoiler: sí que puede. Analizamos la Semana de la Alta Costura parisina para dar con las 10 tendencias de la temporada que desfilaron por la capital francesa.

Alta Costura Primavera Verano 2023

Alta Costura Primavera Verano 2023

/ Imaxtree

Al contrario que en otras casas de moda, los desfiles de Balenciaga en la Avenue George V sucedían en un tenso silencio que el maestro español espiaba entre bastidores. Las modelos, que caminaban altivas, no sonreían, y a su paso generaban una fuerte conmoción que llevaba a algunas mujeres al borde del desmayo. Claro que esto ocurrió hace casi un centenar de años…

Tanto Cristóbal Balenciaga como Christian Dior fueron los responsables de lo que hoy conocemos como la época dorada de la Alta Costura: treinta gloriosos años que fueron capitaneados por dos figuras tan brillantes como opuestas. “La línea simple es la única línea” solía decir Balenciaga. Un hombre que tenía lo mismo de genio que de cabezota: logró pasarse toda su carrera perfeccionando una y otra vez los mismos diseños. Con una limitada producción de alta calidad confeccionada en su propio taller y una narrativa que lo enunciaba como genio, Balenciaga se convirtió en el extremo opuesto de lo que en aquel entonces se consideraba como moda caduca y superficial.

Vestido Cristóbal Balenciaga

Diseño de Cristóbal Balenciaga en el museo Victoria & Albert de Londres.

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Su visión creativa contrastaba enormemente con la filosofía de Christian Dior, quien dijo en una ocasión: “En este siglo, que se ha estado intentando destruir todos los secretos más terroríficos, ¿qué empleo puede ser más admirable que el de crear un nuevo y bello secreto cada seis meses?”. Tras revolucionar la silueta femenina con el 'New Look' allá por 1947, el modista francés fue cambiando la longitud y el corte de los vestidos cada temporada bajo un espíritu creativo y caprichoso fruto del frenesí de posguerra que consiguió contagiar a toda una generación. 

Christian Dior rodeado de modelos luciendo sus diseños

Christian Dior en 1950 rodeado de modelos luciendo sus diseños.

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Cada uno, a su manera, iría construyendo su versión del complejo vínculo que existe entre la moda y el arte, así como la delicada relación entre lo que consideramos una tendencia y aquello que admiramos como una verdadera obra maestra. A pesar de la relevancia de ambos modistos en la historia de la Alta Costura, no debemos olvidar que fueron realmente dos mujeres quienes plantearon originalmente esta contradicción a principios del siglo XX. Mientras Elsa Schiaparelli se rodeaba de artistas de vanguardia como Jean Cocteau o Dalí bajo la convicción de que el diseño de moda “no era una profesión sino un arte”, Coco Chanel defendía precisamente lo contrario: “Nosotros no somos artistas, sino productores de vestidos. ¿Por qué apuntan a la esfera del genio? No necesitamos genio, sino mucho oficio y un poco de buen gusto”. 

Sombrero diseñado por Elsa Schiaparelli

Sombrero diseñado por Elsa Schiaparelli 

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Sin embargo, las opiniones individuales sobre el oficio del modista se disolvían en los desfiles de la ciudad parisina que consiguieron elevar la moda a la categoría de Arte a través de la Alta Costura. La democratización de los diseños de las grandes firmas a través de la venta de licencias no bastó para quitar a la Alta Costura de su pedestal.

Esta temporada no iba a ser menos. Schiaparelli inauguró la Semana de la Alta Costura –como ya es tradición– y consiguió acaparar los titulares durante varios días: bien fuera por la cabeza de león que llevaba Kyle Jenner al hombro en el ‘front row’ o por el look de Doja Cat formado por 30.000 cristales de Swarovski rojos que no dejaban al descubierto ni un sólo milímetro de su cuerpo. La decisión de Daniel Roseberry de representar el infierno de Dante a través de la recreación de tres cabezas de animales salvajes alimentó la controversia, pues a pesar de ser congratulados por PETA por su uso de pieles de imitación, hubo quienes interpretaron los diseños como una manera de exaltar la caza.

Schiaparelli Alta Costura Primavera Verano 2023

Irina Shayk luciendo un diseño de Schiaparelli en el desfile de Alta Costura Primavera Verano 2023

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Desde la intensidad dramática del desfile de Gaultier pasando por la colección más Viktor&Rolf que se haya visto hasta la fecha, la Semana de la Alta Costura siguió conmocionando al público hasta el último desfile, protagonizado por Robert Wun en su debut en el calendario parisino de la Alta Costura. 

Veamos, pues, cuales son las 10 tendencias de la temporada que desfilaron en París la semana pasada: 

Triunfo indiscutible del 'bling bling'

Si algo no faltó en la Alta Costura fue el brillo. De los accesorios metálicos de Valentino a las lentejuelas de Fendi y Chanel, pasando por el fascinante uso de la pedrería de Gaurav Gupta o Alexis Mabille, ni un sólo diseñador olvidó el bling-bling que este 2023 llega con fuerza para conquistar el vestidor. 

La persistencia del 'cut-out'

Una tendencia con la que se ha atrevido hasta la reina Letizia y que se resiste a abandonar la pasarela. Aberturas simétricas o asimétricas, cortes en el hombro, en el escote o en la cintura y un estilo recuperado de la década de los 90 que se aplica tanto a prendas veraniegas como a jerséis de punto e incluso en la sastrería: las posibilidades del 'cut-out' son infinitas, como demostraron Valentino, Alexander Vauthier y Georges Hobeika, entre tantos otros. 

Los tonos pastel dominan la paleta

Esta temporada, sólo el trío del negro, el plateado y el dorado es capaz de competir con la delicada fuerza que han demostrado los tonos pastel. Si en las colecciones de otoño-invierno triunfó el violeta, la paleta se abre esta temporada a nuevos pasteles como el verde menta o el rosa palo, incluyendo además tonos sorbete como el salmón, el coral y el amarillo limón. 

‘Hot pants’

 Kendall Jenner apostaba en noviembre por sacar los 'hotpants' a la calle con un ramo de flores y una sonrisa despreocupada en unas fotografías que dieron la vuelta al mundo. La presencia de esta prenda en la Alta Costura eleva las apuestas. ¿Será 2023 el verano de los ‘hotpants’?

Sastrería oversized

Un estilo que celebrities como Emily Ratajkowski o Gigi Hadid convirtieron casi en uniforme tras la pandemia y que siguen revisitando los diseñadores en esta temporada de la Alta Costura. Una nueva versión aparece en los desfiles de Schiaparelli y de Alexandre Vauthier en una exageración de las formas que alarga la figura en todos los sentidos menos en la cintura, que queda recogida muy al estilo ‘New Look’ de Dior. 

Interiores a la vista

Según un informe de Tagwalk, el 77% de las colecciones de la temporada de primavera-verano 2023 incluyeron transparencias. La presencia de este juego de superposiciones no podía quedarse fuera de la Semana de la Alta Costura, que bien en forma de ‘naked dress’, revistiéndose de pedrería, así como jugando con capas y capas de finísimas telas, ha conseguido robar el protagonismo de unos cuantos desfiles.

Balaclava, accesorio estrella

En 2019 aparecieron tímidamente en las colecciones de Prada y de Gucci, pero no fue hasta 2021 –culminando en el desfile de Miu Miu de otoño-invierno 2021–, cuando la balaclava se convirtió en el accesorio más cotizado por los fashionistas. Aún en 2023 se resisten a abandonar su posición como uno de los complementos más virales en redes sociales, recibiendo la masterización que se merecen de la mano de la Alta Costura. La balaclava cubierto de plumas blancas que cerró el desfile de Gaultier es uno de los mejores ejemplos de la versatilidad de este accesorio: confeccionado en punto, es el mejor aliado del día a día, pero en su versión más sofisticada, es ideal hasta para el más exclusivo de los eventos. 

Efecto Y2K

Si Giambattista Valli presentó casi la mitad de sus diseños teñidos de rosa, Valentino no pudo resistirse a reutilizar el tono Pink PP que dominó su desfile de otoño-invierno 2022.  La presencia del tiro bajo, las minifaldas y el pelo sintético en las pasarelas de la ciudad parisina confirman lo que todos ya sabíamos: a la influencia dosmilera todavía le queda mucho que ofrecer

Estilo lencero 

Los vestidos lenceros de corte sobrio y tirantes finos vuelven a desfilar por las pasarelas. No es el único estilo de lencería que veremos esta temporada. El desfile de Fendi fue toda una oda a la delicadeza del encaje, que, combinado con brillos y lentejuelas, parece que se convertirá en protagonista del atuendo festivo esta temporada. 

Drapeados y fruncidos

Una de las técnicas más reconocidas de la Alta Costura desde que Madame Vionnet experimentara con la técnica a través del corte de las prendas, el drapeado se convirtió en tendencia tras la cuarentena  y lleva presente tanto en la calle como en la pasarela desde entonces. He aquí el máximo ejemplo de cómo la admiración artística de una técnica tan antigua como la propia civilización griega no es incompatible con su popularización y adopción en masa.

Si la moda debe pertenecer al mundo de lo atemporal o doblegarse a las tendencias parece una lucha interna que aún no estamos dispuestos a resolver, pero lo que está claro es que la moda no es ajena a su contemporaneidad. Es más, es reflejo constante de la contingencia social, y por tanto, incapaz de eludir las tendencias que remueven el armario cada temporada.

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