Estas cinco playas españolas se cuelan en la lista de las mejores de Europa
Cualquiera de ellas nos parece un destino maravilloso para pasar unas vacaciones idílicas frente al mar.
Si aún no tienes claro cuál va a ser tu destino estas vacaciones estás de enhorabuena porque la organización European Best Destinations (EBD) acaba de publicar una lista con las 15 mejores playas del continente. En ella, encontramos desde localizaciones de ensueño con arena fina y aguas cristalinas a espectaculares paisajes con imponentes formaciones rocosas. Por supuesto, encabezando este ‘ranking’, se encuentra un enclave español, concretamente, mallorquín, pero, a lo largo de esta sugerente enumeración descubrimos hasta un total de cinco playas de nuestro país. Así que, toma buena nota porque, si quieres viajar a un lugar paradisíaco sin tener que traspasar nuestras fronteras, aquí encontrarás el destino perfecto.
Torrente de Pareis, Mallorca
Entre desfiladeros, se abre paso un cañón, de más de tres kilómetros de longitud, que llega a la famosa cala de Sa Calobra, su desembocadura natural en el mar. Acceder a ella no es una tarea sencilla, al menos, si no eres demasiado aventurera, pero no cabe la menor duda de que, cuando llegues, todo el esfuerzo habrá merecido la pena. Y es que, se puede llegar a tardar hasta seis horas en recorrer los nueve kilómetros de su acceso a través de una ruta de difícil senderismo. Eso sí, no te preocupes porque si el ‘trekking’ no es lo tuyo, también puedes llegar hasta ella en barco, de hecho, hay excursiones programadas desde el puerto de Söller; con varias travesías al día.
Playa de Amio, Cantabria
El tercer puesto queda reservado a la también conocida como playa de Pechón, al ser éste el municipio más cercano al enclave. Visitarla es sumergirse en la naturaleza más salvaje y pura, con todos los ingredientes propios de la costa cántabra. Su arena fina y blanca se mezcla con rocas de gran tamaño y, además, los fuertes vientos de la zona generan un oleaje propicio para la práctica de deportes como el ‘windsurf’. Como apunte, tenemos que decir que, en realidad, no es una playa propiamente dicha, sino un ‘tómbolo’ o una lengua de arena que se une con un pequeño islote durante la bajamar, por ello, según EBD, «es más bonita cuando la marea está baja, de lo contrario queda cubierta».
Playa de Las Catedrales, Galicia
Se encuentra en quinta posición y es, como dicen desde la plataforma de turismo gallego, «un monumento natural con una dimensión sobrenatural. Sólo hay que esperar a la marea baja, descalzarse, echar a andar... y uno ya se siente en la gloria». Y no podemos estar más de acuerdo porque, a lo largo de los siglos, el mar ha esculpido en los acantilados (entre los arenales de Augasantas y Carricelas) todo un repertorio arquitectónico de arcos, columnas y bóvedas que han hecho que se bautice a la zona con este evocador nombre.
Cala Granadella, Alicante
«¿Qué puede haber mejor que una playa de aguas turquesas en una de las regiones más soleadas de Europa?». pregunta EBD. En el sexto lugar, encontramos este bonito paraje de Jávea (y uno de los más turísticos), lleno de cantos rodados bañados por un mar cristalino que es, sin duda, uno de sus principales reclamos. Pese a la masificación de la zona, conserva un aspecto muy salvaje y natural, eso sí, con todos los servicios a tu alcance.
Cala Moraig, Alicante
Ubicada en la localidad de Benitachell encontramos el último enclave español de la lista, concretamente, en el noveno puesto. Se trata de una playa de guijarros, por lo que, quizás, no sea la mejor opción para visitar en familia, pero, sin duda, hará las delicias de los amantes de la naturaleza. Ten en cuenta que, para acceder a este precioso y escondido paisaje, debes aparcar cuesta arriba y bajar andando. Su aforo está limitado, así que, si quieres visitarla, te recomendamos que reserves tu visita con, al menos, una semana de antelación. Además, allí encontrarás también la famosa Cova dels Arcs, una preciosa cueva creada por la acción erosiva del oleaje.