El look menos acertado de Victoria Federica: cejas rosas, trenzas dosmileras y mucho más

Acostumbrada a acaparar todos los flashes en cada photocall que pisa, en los looks de Victoria Federica todo está cuidado al detalle. A sus 22 años, la hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar ha iniciado una prometedora carrera en las redes sociales, donde se ha posicionado a base de fotos virales y likes como la primera y única ‘royal influencer’ de nuestro país (aunque su prima Irene Urdangarín podría seguir la misma línea). 

Conscientes de este tirón, cada vez más marcas deciden trabajar con ella: la última, Multiopticas, a la que se ha unido como embajadora durante un fiestón en Madrid que ha reunido este jueves a famosos como Óscar Casas, Laura Escanes o Violeta Mangriñán. Y para su debut, Vic (así es como le llaman sus amigos) ha escogido un atrevido look que acumula muchas de las tendencias de moda y belleza del momento. Las analizamos. 

Decisiones ‘beauty’: cejas rosas y peinado multitrenzas

Empecemos por su maquillaje, que es probablemente el elemento más llamativo de su estilismo. La sobrina del rey Felipe nos ha dejado sin palabras al sumarse a la tendencia de las cejas rosas que arrasa en TikTok este año y que artistas como Rosalía o Tini Stoessel ya han probado anteriormente. 

Mención aparte merece su peinado, una auténtica sorpresa sobre todo teniendo en cuenta que en la mayoría de sus apariciones públicas lleva su melena castaña suelta y con la raya al medio. ¿Su apuesta? Un recogido que combina una coleta pulida de la cual salen tres trenzas con otras dos trencitas en los mechones delanteros(un detalle de aires dosmileros que está de plena actualidad entre la generación Z).

Elecciones de moda: ‘cut out’, vaqueros cargo, cinturón cadena…

Entrando ya en su vestuario, queda claro que Victoria Federica se ha entregado al ‘más es más’. Su ‘outfit’ acumula muchas de las tendencias del momento, pero el resultado final peca de exceso de información. Lo vemos, por ejemplo, en su body de silueta ‘tank top’ con una abertura lateral que deja a la vista buena parte del torso, sobre el que luce una cadena joya muy interesante. Por separado esta pieza es un sí rotundo, pero combinada con el cinturón cadena (otro detalle con reminiscencias ‘Y2K’), el cordón plateado del cuello y los pantalones vaqueros cargo anchos de tiro bajo y llenos de bolsillos (una prenda que se repite sin parar en su armario), da lugar a un look sobrecargado que no termina de convencernos. 

Por el contrario, los complementos elegidos - gafas de sol de Multiopticas, botas cowboy negras, bolso de hombro con forma de medialuna- nos encantan y nos recuerdan mucho más a su estilo habitual: elegante y con toques boho sin renunciar a las tendencias de cada momento.