Paula Echevarría sabe que las 'baby braids' son obligatorias en verano

En la pasada temporada de verano, comentábamos que las denominadas 'baby braids' probablemente volverían a formar parte de la temporada estival de entonces, tal y como venían haciendo en los años anteriores. Lo cierto es que a día de hoy son muy pocas las 'celebrities' e 'influencers' que no han probado a llevarlas. Entre las que sí, se nos vienen a la cabeza, por ejemplo, Cristina Pedroche, María Pombo, Bella Hadid o Margot Robbie. Esta última, precisamente, fue quien comenzó a darles visibilidad en la recordada promoción de una de sus últimas películas, 'Érase una vez en... Hollywood', a la que acudió homenajeando a su personaje en la cinta de Quentin Tarantino, Sharon Tate.

El secreto del éxito de estas trenzas no es solo que son muy sencillas y rápidas de hacer, sino que le aportan un detalle diferente al pelo sin abandonar su naturalidad. Por ello, es habitual que estas 'baby braids' se coloquen en los primeros mechones de la cabeza, para enmarcar el rostro, aportarle luminosidad y despejarlo. Teniendo en cuenta que en verano si hay algo que nos molesta por encima de todas las cosas es el pelo, nos parece una opción excelente para no solo recogerlo en un moño, sino también añadirle un par de trenzas que puedan transformar el peinado en algo más original.

Puede que eso es lo que haya pensado Paula Echevarría en una reciente entrega de premios, a la que la actriz ha acudido con un estilismo digno de analizar al detalle. Concretamente, ha elegido un 'little black dress' (LBD) firmado por Andrés Acosta, que presenta un escote corazón muy favorecedor y un cuello de tipo 'halter'. En lugar de utilizar la propia tela de la prenda, el diseñador ha optado por confeccionarlo con distintas cuentas y 'paillettes', formando un rombo a la altura de la tráquea.

Otro de los detalles del vestido que no ha pasado desapercibido ha sido su corte en dos altura, con una parte central de una longitud menor, formando una especie de escala que ofrece un efecto óptico de doble prenda, como si se tratase de una capa. Además, el minivestido presenta dos solapas a ambos lados de las caderas que estilizan la cintura y dan mayor predominancia a esta otra zona del cuerpo. Finalmente, presenta una estructura central, a la altura del abdomen, con un dibujo con forma de corona, que se alarga hasta superar la longitud del LBD y en el que vuelven a multiplicarse las cuentas en tonalidades blancas, azules y marrones.

Para completar el estilismo, como decíamos antes, la actriz ha optado por lucir unas mini trenzas para recoger sus dos mechones principales, raya en medio y una coleta trenzada al más puro estilo Pocahontas. A continuación, ha optado por complementos muy sencillos: unas sandalias de de tiras tacón en color negro, con las que ha lucido una pedicura a juego, así como un brazalete dorado de Fahoma Madrid. Para el maquillaje, una vez más, se ha puesto en manos de Miguel Álvarez.