Trucazo para que las toallas queden suaves, blancas y gustosas

En nuestra casa parece que la colada no acaba nunca. Pero trabajamos con constancia para conseguir que toda esa montaña de ropa quede limpia, con un olor increíble y con un tacto suave y sedoso. Para nosotras el momento colada y el cuidado de nuestras prendas es muy importante. Ya no solo buscamos el mejor perfumador para la ropa, también nos preocupa el cuidado de la prenda y el resultado en cuanto al tacto, sobre todo, en las toallas. 

Tenemos normas para la ropa blanca o la ropa de color y tenemos especial cuidado con las prendas delicadas. Mantener esas normas y protocolos nos ayudará a obtener un resultado excepcional en el presente y a futuro la prenda durará más tiempo como nueva. Pero ¿qué pasa con las toallas? Habrás observado que las toallas en un lavado normal con jabón y suavizante salen con una textura acartonada, rígida y para nada con ese perfume que esperamos. 

Las toallas también necesitan de una serie de trucos y normas que nos ayudarán a conseguir el resultado deseado y, sobre todo, favorecerán a que los textiles estén más cuidados y protegidos, por lo que durarán más tiempo. 

Tan solo necesitas tener en cuenta una serie de pasos y truquitos que te ayudarán a lograr esas toallas de hotel mullidas, frescas y con un perfume que dure en el tiempo. Y no, ya te adelantamos que no vale solo con detergente y suavizante, como tampoco vale incorporar las toallas a cualquier lavadora. 

Los trucos para lograr unas toallas suaves y mullidas

Lo primero que tienes que tener en cuenta para que tus toallas queden perfectas es que tienes que poner una lavadora exclusiva de toallas. A partir de ahí solo debes implantar estos pequeños trucos.

Una vez tengas ya las toallas en la lavadora inserta en el tambor medio vaso de bicarbonato de sodio, esto evitará los malos olores en la ropa. 

Ya en el cajetín añade el detergente habitual, oxígeno activo para blanquear tus toallas y sustituye el suavizante por vinagre de limpieza. Esto ayudará a que las toallas queden suaves y más blanditas. Ahora si te gustan las toallas perfumadas puedes añadir al vinagre de limpieza unas gotas de aceites esenciales o un perfumador para ropa, que quedará impregnado su olor.

Una vez lavadas, debes secar tus toallas a la sombra o en secadora, de esta manera lograrás conseguir unas toallas suaves y gustosas.