Las 10 claves para una longevidad saludable, según los expertos

"A los treinta las personas deberían planificar su primer plan de pensiones para llegar a los sesenta con dinero ahorrado. A los sesenta las personas deberían planificar su longevidad para llegar a los noventa bailando, disfrutando de su familia o simplemente haciendo todo lo que su mente les pide hacer. Las cosas importantes siempre han tenido un plan con indicadores y objetivos. Es hora de trasladar estos conocimientos a su longevidad". Así presentan los doctores Miguel Fernández Torán y Clara Fernández Porta su libro Las 10 claves para una longevidad saludable, un libro para preparnos a vivir mejor más años.

Charlamos con ellos para conocer los 10 hábitos que tendríamos que integrar en nuestra vida y qué diagnósticos deberíamos tener en mente para asegurarnos de que llegamos llenos de energía y salud a los noventa:

Qué entendemos por longevidad

En el mundo de la longevidad existe una gran controversia sobre los años que queremos vivir y cómo queremos que sea nuestra calidad de vida. Lo ideal sería pensar que deseamos ambos escenarios; es decir, vivir mucho tiempo y con una salud plena. "Nos cuidamos para vivir más años que la media, y según la edad que tengamos deberíamos aspirar a 90 o 100 años. Y nos cuidamos para además llegar en nuestro máximo potencial de salud. Queremos que nuestro cuerpo pueda hacer casi todo lo que nuestra mente desee hacer y queremos controlar aquellos factores que más van a incidir en el desarrollo de enfermedades crónicas o mortales", advierten los expertos. 

Para ellos, una longevidad saludable tiene varios niveles: "Si no hemos hecho nunca nada lo primero que queremos es controlar las enfermedades que nos van a causar problemas, pero este ámbito ya lo tenemos controlado, querremos trabajar en optimizar nuestra salud y finalmente en ralentizar al máximo el proceso de envejecimiento. Es un proceso que consiste en múltiples capas de diagnósticos y tratamientos médicos y tenemos que desterrar la idea de que comer poco y andar mucho es suficiente". 

¿Les preocupa más a las mujeres la belleza que su salud?

Explican los doctores que la psicología del individuo hace que sea muy difícil vivir sólo de un objetivo a largo plazo (longevidad - prevención), por lo que todo plan tiene que trabajar los objetivos a corto y medio plazo. "No es incompatible prevenir con verse guapo, con energía, más fértil o menos inflamado. Por eso, en un plan intentamos combinar objetivos de diferentes niveles para mantener el nivel de motivación a la vez que intentar que estos estén vinculados con un impacto a largo plazo", aseguran Fernández Torán y Fernández Porta.

"Creo que no es cierto que a las mujeres les preocupe más su belleza que su salud, lo que si es cierto es que es más fácil aplicar bótox que llevar un plan de optimización hormonal, con nutrición, ejercicio, cronoregulación y todos los suplementos aparejados. Poco a poco iremos viendo planes de salud más integrales, más personalizados y con un impacto a medio y largo plazo, además de una piel fabulosa. Y mientras se puede combinar todo. Lo que creo que es un error es dedicar el dinero solo a acciones de corto plazo", sostienen. 

La longevidad depende de la ciencia

Los expertos explican que el límite de años que se puede vivir, con salud o no, depende de la ciencia: "Ahora mismo se conocen personas que han llegado a los 120 años pero apenas hemos aplicado tratamientos de longevidad a la población. La ciencia trabaja con una hipótesis que se llama Velocidad de Escape de Longevidad, donde el objetivo consiste en llegar a ser casi inmortal tante para tomar conciencia de que no hay un límite de edad biológica. Hay animales que se auto-regeneran y no mueren nunca, o no mueren por causas internas. Y cada vez se tiene más claro que el concepto muerte no es una obligación escrita en las reglas de la biología, es una suboptimización que hace que una especie sea más fértil y por tanto ha ganado más puntos pero sigue estando por ahí pululando en nuestro ADN la posibilidad de la inmortalidad".

Las mujeres envejecen peor

Sobre la diferencia entre hombres y mujeres, contrario a lo que muchos piensan, las mujeres envejecen peor: "La menopausia es un drama, que además no comparten casi ningún otro mamífero. Las mujeres se cuidan más pero porque las pobres si no estaríamos incluso peor. Hay muchos científicos que piensan que es más una construcción social, la mujer (históricamente) que cuidar de todos, no se jubila nunca y por tanto no se puede permitir ponerse enferma, porque es ella la que cuida". 

Clara Fernández Porta añade que, lamentablemente, en el mundo de la longevidad femenina, es decir en las diferencias en envejecimiento entre hombres y mujeres, "se ha dedicado tan poco dinero que todavía estamos en pañales. Se ha dedicado casi el doble a la investigación de la longevidad canina que a la femenina, así que cualquier consejo que te diese sería muy simple y banal y como mujer pienso que es más importante tomar conciencia de que hay que invertir más para saber más". "Yo como mujer jamás pensaría que haciendo lo mismo vamos a vivir más, porque no tenemos datos al respecto. Es más yo me esforzaría por cuidarme todavía más, sabiendo que la menopausia acelera todos los biomarcadores de envejecimiento", concluye.

La relación entre el estrés y la longevidad

Los doctores indican que gestionar el estrés es un ámbito "muy especial" y, aunque no son psicólogos, saben que tiene un impacto terrible en el envejecimiento: "Curiosamente el estrés es más subjetivo de lo que creemos. A mismo nivel de estrés, hay personas que viven en una situación continua de emergencia e inflamación y otras que lo modelan como un reto de autocrecimiento. Yo no sé cómo se consigue eso, más que sabiendo que es posible y buscando ayuda de un profesional. Hay personas que con un libro de autoayuda pueden desbloquear un potencial interno que siempre tuvieron ahí y otras que necesitan una guía más continua, incluso que lo único que pueden hacer es cambiar su entorno totalmente para poder cambiar su respuesta".

"La realidad es que vivimos en contextos con más estrés y lo ideal es reducir al máximo su incidencia, eliminando los factores innecesarios y trabajando para que nos afecte lo menos posible los que son inevitables. El gran descubrimiento de las últimas décadas es que la salud emocional es un componente muy importante de la salud global y en especial de la longevidad, así que no podemos pensar en optimizar nuestro cuerpo sin optimizar nuestra mente también", concluyen.