Shakira se enfrenta a una nueva demanda por supuesto delito fiscal en España

Shakira está viviendo una especie de montaña rusa emocional de la que le va a costar mucho bajarse. Por un lado, la colombiana está viviendo su mejor momento profesional, sus canciones van directas al número uno y hace unas semanas hacía historia al convertirse en la primera artista latinoamericana en recibir el "Video Vanguard Award", uniéndose a una lista de estrellas que incluye a Madonna, David Bowie o Beyoncé. Y siempre, con la mente y el corazón puestos en sus dos hijos, a los que dedicó este premio y que se han convertido en el pilar fundamental en su vida tras su divorcio de Gerard Piqué.

Pero por otro, la colombiana está pendiente de juicio en España, en el que será uno de los momentos más difíciles de su vida personal y profesional. Pese a que ya no reside en la ciudad condal, deberá volver para sentarse en el banquillo de los acusados el próximo 20 de noviembre, ya que en la Audiencia de Barcelona se iniciará el juicio contra ella por cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos presuntamente al no presentar la liquidación del IRPF y del Impuesto de Patrimonio de 2012, 2013 y 2014. A todo esto, hay que añadir una noticia que conocimos ayer y que complica aún más la situación legal de Shakira a medio y largo plazo.

La fiscalía acusa a Shakira de defraudar 6 millones de euros a Hacienda

La cantante ha sufrido un importante revés judicial cuando ayer la Fiscalía de Delitos Económicos presentó una segunda querella en la que se la acusa de presunto fraude fiscal a través de un complejo entramado de empresas en paraísos fiscales. La nueva querella reclama una deuda de 6.686.502 euros correspondiente a la declaración de impuestos del año 2018.

Esta acción legal se ha presentado en los juzgados de Esplugues de Llobregat (Barcelona), donde la Fiscalía sostiene que Shakira tenía su residencia junto al futbolista Gerard Piqué. La cantante ya está esperando un juicio, programado para comenzar a partir del 20 de noviembre, por supuestamente defraudar 14,5 millones de euros a Hacienda entre 2012 y 2014 con los mismos impuestos. En ese caso, la Fiscalía busca una condena de ocho años y dos meses de prisión.

Residencia legal en Barcelona

Volviendo a esta segunda demanda, la Fiscalía argumenta que Shakira, siendo residente en España, estaba legalmente obligada a presentar declaraciones de IRPF e IP y tributar por su renta mundial, independientemente de su origen o la residencia del pagador. Sin embargo, se alega que la artista utilizó un complejo esquema de sociedades domiciliadas en países de baja tributación y alta opacidad para evitar el pago total de los impuestos correspondientes.

Las supuestas sociedades utilizadas por Shakira para reducir sus obligaciones fiscales se habrían constituido en varios países, incluyendo Luxemburgo, Holanda, Malta, Islas Vírgenes, Panamá, Bahamas, Estados Unidos y Liechtenstein. La fiscal afirma que algunas de estas empresas carecían de actividad real y solo existían para gestionar los ingresos y gastos de la cantante. De momento, el gabinete de comunicación de Shakira precisó a EFE que no ha recibido "notificación alguna en Miami, domicilio oficial de la cantante, sobre la querella", y resaltó que su equipo legal está "centrado en la preparación del juicio" que tiene pendiente en noviembre.

La cantante colombiana lo tiene realmente complicado para hacer frente a sus problemas con la justicia española, y más ahora con la apertura de una nueva causa por otro delito fiscal.