¿Por qué todo el mundo está hablando de los pendientes de manzana de la reina Letizia?
La monarca se quedó prendada de ellos durante su visita a la parroquia asturiana de Arroes.
Tras la entrega y celebración de los Premios Princesa de Asturias, la familia real acudió a otro de los actos más emblemáticos que tienen lugar esos días en la tierra natal de Doña Letizia. Se trata de la entrega del Premio al Pueblo Ejemplar, que en este año recayó en las parroquias de Arroes, Pion y Candanal, en Villaviciosa. Junto a la princesa Leonor y la infanta Sofía, don Felipe y doña Letizia recorrieron las calles de las tres localidades seleccionadas este año para conocer de primera mano a sus habitantes.
Doña Letizia sorprendió a todos con un favorecedor jersey de lana de estampado tie dye en alegres tonalidades de la marca Psophia y unos vaqueros ajustados para lograr un look perfecto y cómodo para esa ocasión. En lo que se refiere a los accesorios, la monarca inició su visita luciendo los triple aro en oro rosa y diamantes de Gold&Roses, que son de sus favoritos, pero a los pocos minutos la vimos con un modelo totalmente distinto. Un detalle pequeño que no ha pasado desapercibido y que demuestra la importacia que la mujer de Felipe VI le da a las cosas artesanales y cotidianas.
Los pendientes de manzana que la reina Letizia se compró en un mercadillo
En uno de los puestos, la reina Letizia tuvo un 'flechazo' con unos pendientes artesanales y no se lo pensó dos veces. Se los probó, le encantaron, los pagó y se los puso en el momento. "No suelo hacer esto", dijo para sorpresa de todos mientras se quitaba los pendientes que llevaba. Se trataba de un diseño artesanal y sostenible hecho por Patricia Escobar, creadora de Mondo Manzana, que, preocupada por la 'basuraleza', le surgió la idea de trabajar con la magaya, que no es nada más que el resto de la manzana después de hacer la sidra.
Tal y como publica Vanitatis, a la propia Patricia, desde la Asociación de Vecinos de Arroes, le pidieron que hiciese algunas piezas para regalar tanto a doña Letizia y a sus hijas como a don Felipe en nombre del pueblo. Además, puso un puesto en un mercado artesanal, que fue donde la Reina se quedó embelesada con aquellas piezas, sobre todo conociendo el origen de los materiales y el proceso con el que se hacen. "Primero se probó unos en un azul turquesa, y se estuvo mirando al espejo, pero luego, al ver los verdes, pensó que le quedaban mejor con el jersey que llevaba puesto".
El bonito gesto de la reina Letizia
Doña Letizia pagó los pendientes, que hacían juego con su jersey tie-dye, y los lució durante todo el día. "Para mí es un gran orgullo, aunque estoy un poco asustada por toda la repercusión, tengo muchos encargos y el proceso es largo, porque, por ejemplo, los pendientes de la Reina tardan tres meses en secarse, ya que es todo artesanal", explicó Patricia al citado medio, quien destacó también la ligereza de sus diseños.
Un increíble y pequeño gesto de la reina Letizia que nadie olvidará, especialmente la fundadora de la marca Mondo Manzana.
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