¿Funcionan realmente los champús anticaída?

Es una de las grandes dudas de la población que genera grandes quebraderos de cabeza entre tienes sufren problemas relacionados con la pérdida de volumen o densidad.

Por qué es importante incorporar champús sin sulfatos ni siliconas a tu rutina capilar (hablan los expertos)

Tipos de cepillos para cada cabello
Tipos de cepillos para cada cabello / iStock

Una de las grandes preocupaciones de la sociedad, sobre todo a medida que va cumpliendo años, es encontrar una forma de frenar la siempre compleja caída del cabello. El miedo a perder densidad y volumen y lucir una melena "pobre" nos lleva en muchas ocasiones a probar todo tipo de alternativas disponibles, entre ellas, el champú anticaída. Pero, ¿de verdad funcionan? Esta es una pregunta que ronda la cabeza de quienes sufren de pérdida de pelo diariamente y que ha llevado a grandes debates tanto en redes sociales como en ámbitos más específicos.

"Consigue sobre todo dar mayor cuerpo y sensación de volumen al cabello, pero sus propiedades anticaída son escasas porque está poco tiempo en contacto con el cuero cabelludo y no le da tiempo a ejercer dicha acción como se pueden tener las soluciones o ampollas", señala Belén Acero, farmacéutica titular de Farmacia Avenida de América y Nutricionista. Además, muchos expertos coinciden en que puede ayudar a preparar el cabello para determinados tratamientos capilares, pero no es un producto milagroso ni conseguirá dar un giro de 180º a ninguna melena.

Champú anticaída: ¿sí o no?

Es esa sensación de grosor y volumen que otorgan los champús anticaída, que quienes normalmente cuentan con un cabello muy fino o con poca cantidad pueden ver como un gran punto a favor lo que le he llevado a situarse como uno de los productos más demandados en la rutina capilar. Como también el precio. "Lo que tienen normalmente estos champús son polímeros que se adhieren a la fibra y hacen que se va con mayor sensación de grosor", explica la propia Acero que matiza que su éxito y popularidad "se debe a que es un producto económico que da menos pereza usarlo que una loción que hay que usar todos los días, con los inconvenientes que esto pueda causar, o tomar suplementos, que hay personas que tienen reticencia a hacerlo".

Quizás por ello, la pregunta de si debemos invertir en uno o dar preferencia a otro tipo de champús sigue siendo necesaria. "Tiene sentido invertir en uno, pero conociendo bien qué se puede esperar de ellos, cómo usarlos y sus limitaciones, no ‘pedir imposibles’", explica Acero que habla de que "siempre que sea usado como complemento a un tratamiento más adecuado como son cápsulas o ampollas anticaída" puede conseguir grandes resultados, "así una parte del tratamiento actúa de forma más eficaz mientras que se refuerza con la mejora de aspecto que se percibe gracias al champú y esto anima a no dejar el tratamiento a medias o antes de haber alcanzado todo su potencial de eficacia.

La propia farmacéutica, con el firme objetivo de ayudar a quienes están en un momento de duda, habla de la eficacia comprobada del Revita de DS Labs, "que un estudio clínico que indica que frena la caída, pero siempre que se aplique en unas condiciones muy específicas, a diario, dejar un tiempo de actuación en cuero cabelludo". Ahora simplemente depende de ti.

Es importante señalar que la caída del cabello es frecuente entre la población y algo totalmente natural que no debe ser motivo de preocupación, según los expertos a diario podemos llegar a perder entre 50 y 200 cabellos, una cifra que incluso puede aumentar en periodos de cambio de estación como el salto al otoño en el mes de septiembre o a la primavera en marzo, así como etapas complicadas a nivel personal o profesional con picos de estrés. El cabello suele sufrir notablemente cuando estamos en un momento más bajo. La preocupación puede llegar cuando vemos que esta caída es llamativa, llegando a verse en zonas visiblemente afectadas en puntos específicos de la cabeza, y si también es prolongada en el tiempo; será entonces cuando nos pongamos en manos de expertos para ver la causa y hacer frente a ella. Evitar caer en productos que despuntan en redes sociales y que son catalogados como "milagrosos" porque este puede acabar por ser más perjudicial que beneficioso para el cabello, sobre todo si esta situación se debe a factores desconocidos. Un buen diagnóstico podrá ser determinante.

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