Regresa a los 90 con el vestido 'denim' más grunge de Zara que ha agotado existencias

Para muchos, el 'grunge' no es más que una etiqueta que se atribuyó a un tipo de música llegada la década de los 90. Si bien ya lo había anticipado Neil Young, el considerado padre de este movimiento, décadas antes, no fue hasta la aparición de grupos emblemáticos como Pearl Jam y Nirvana cuando la música volvió a traspasar límites más allá de los riffs endiablados y las letras crudas. Como en cada época, una nueva estética había nacido, rompiendo casi por completo con la imperante años antes.

Porque fue en la primera década de los 90 cuando Seattle, en Estados Unidos, fue punto de referencia para músicos y artistas a la hora de pensar en sus nuevas creaciones, en las que abundaban melodías vocales llenas de energía y de fuerza y una puesta en escena áspera y sencilla. A los escenarios se subían iconos como Kurt Cobain, Chris Cornell o Courtney Love, líder de 'Hole' y pareja del primero, con camisas anchas, vaqueros desgastados y ropa rota, que venía a simbolizar el pesimismo presente en los años previos al cambio de siglo.

Esta estética nunca ha dejado de estar presente en las firmas de moda, que han seguido apostando por esta forma de rebelarse contra lo establecido, con pantalones que poco dejan a la imaginación y muestran por completo rodillas y lo que va más allá de estas articulaciones y que también lograron colarse en los 2000. Ejemplo de que esta moda hoy sigue vigente más que nunca es el demostrado por Aitana hace unos días, cuando acudió a 'El Hormiguero' con unos vaqueros repletos de rotos.

Debido a que la moda nunca deja de evolucionar y retroalimentarse con estéticas pasadas, que tomas nuevos significados conforme avanzan los años, algunas marcas han decidido retomar este estilo y lo han hecho en los últimos años sin perder como referencia las partes rotas y deshilachadas de las prendas. De ahí que unos pantalones con la rodilla prácticamente a la vista se sigan considerando ejemplo de rebeldía pero que, a su vez, sean símbolo de elegancia cuando se combinan con una blazer elegante o una blusa bonita.

Un poco de todo es lo que tiene el último vestido 'denim' de Zara, que tiene un precio de 59,99 euros y que actualmente no dispone de una sola existencia. Por lo que hemos visto, entendemos el por qué... Y es que se trata de un diseño que combina el formato de la cazadora vaquera habitual con el de una falda, con bajo asimétrico e hilo blanco a la vista, para destacar aún más su informalidad e influencia noventera. ¿Te atreverías con él?