Los zuecos de Sarah Jessica Parker que nos hacen soñar con una colaboración entre Birkenstock y Gucci

Hay muchas razones por las que ‘Sexo en Nueva York’ está considerada como una serie de culto para el mundo de la moda y, quizás, la historia de amor entre su protagonista, Carrie Bradshaw, y los zapatos de Manolo Blahnik sea una de las más importantes. El idilio fue tal que llegó incluso a traspasar la pantalla y al personaje, consolidándose con Sarah Jessica Parker pisando alfombras rojas y photocalls sobre stilettos de infarto con el sello del diseñador canario. Sin embargo, dos décadas después y con las tendencias que abogan por la comodidad al alza, parece que la columnista más cool de la gran manzana (reconvertida en podcaster en la trama de ‘And just like that…’) podría estar explorando un nuevo universo en materia de calzado que, no obstante, ha despertado entre sus fans el mismo furor que solían generar sus adorados ‘Manolos’.

La noticia surge después de la filtración de unas fotos del rodaje de la segunda temporada de esta secuela de HBO Max en las que Carrie aparece con uno de sus looks más extravagantes hasta la fecha: abrigo de cuadros estilo batín, leggings (quizás de pijama), guantes, tote bag… una combinación que muchos han asociado con una corriente bautizada recientemente por las redes como NBN (o lo que es lo mismo, Netflix-Baguette-Netflix) que no es otra cosa que salir a la calle para hacer pequeños recados con la ropa típica de estar por casa. 

Pero, por llamativo que resulte su atuendo, ha sido su calzado -plano, comfy y, quizás, tan exclusivo que no llegue a las estanterías de ninguna tienda- lo que ha atrapado toda la atención de las ‘insiders’. Se trata, como te adelantábamos, de unos zuecos tipo Birkenstock con el monograma de Gucci que ella ha combinado con calcetines blancos y que han hecho soñar a la industria con una posible colaboración entre la casa italiana y la firma alemana de sandalias abandera del confort. 

Por ahora ninguna de las dos marcas se han pronunciado al respecto y, aunque es poco probable que LVMH y el grupo Kering se asocien para este proyecto, no podemos pasar por alto que Birkenstock ya ha unido fuerzas anteriormente con otras enseñas de lujo como Dior o la mencionada Manolo Blahnik, y que en el catálogo de Gucci no faltan los zuecos con su logo estampado.

Sin una fecha de estreno confirmada, no sabemos cuánto tiempo tendremos que esperar para resolver el misterio y, además, conocer la explicación del guion a este peculiar ‘outfit’. Puede que, como vimos en la primera temporada de ‘And just like that’, la protagonista solo se haya bajado de sus eternos tacones por prescripción médica tras su operación de cadera o, quién sabe, quizás sea el resultado de un cambio de estilo más profundo ligado a la misma comodidad y aceptación que en los últimos capítulos ya se materializó en una inspiradora melena canosa. En cualquier caso, es un hecho que la Carrie Bradshaw de 50 años no es la misma que conocimos con 30 y ahora ha dejado entrar en su armario los zapatos planos (por supuesto, de diseñador). Cruzamos los dedos por poder copiárselos pronto.