El día que Taylor Swift fue la estrella de la Super Bowl sin subirse a un escenario

Estaba difícil que Taylor Swift presenciara en directo la final de la Super Bowl puesto que los pasados días 7, 8, 9 y 10 de febrero ha estado con su su gira de conciertos The Eras Tour en Japón, pero está claro que para la artista no hay nada imposible. Después de volar durante más de 17 horas y teniendo en cuenta la diferencia horaria que existe entre Tokio y Las Vegas, la cantante llegó a tiempo al Allegiant Stadium para presenciar la final de la Super Bowl entre el equipo de su novio, los Kansas City Chiefs, y los San Francisco 49ers.

Llegó incluso con dos horas de adelanto al estadio, donde después las cámaras no dejaban de enfocarla mientras animaba a a Travis Kelce desde el palco junto a su inseparable amiga Blake Lively, quien lucía para la ocasión un chándal rojo y un top blanco –"¿Alguien ha visto a mi mujer?", escribía en clave de humor Ryan Reynolds en Instagram haciendo referencia a la cuota de pantalla que le dieron tanto a Taylor Swift como la actriz de Gossip girl–.

No necesitó Taylor Swift actuar en el esperado intermedio de la final de la Super Bowl para convertirse en la estrella más buscada de la noche. Más allá de en los jugadores, en este mediático partido todos los ojos estaban puestos en ella y no quiso desaprovechar la oportunidad de mostrarse tal cual es.

Bailes, cánticos, aplausos, abrazos... la elegida como Persona del Año 2023 lo dio todo desde su asiento, llegando incluso a improvisar un concurso de cerveza con otra de sus compañeras de grada, la rapera Ice Spice, con quien bebió una lata de un trago y terminó estampándola contra una mesa para sorpresa de todos los que estaban viéndolo desde los videomarcadores. "Icon", escribieron en las redes sociales de la NFL.

Taylor Swift: look en negro y colgante con significado

El look de Taylor Swift tampoco pasó desapercibido. La autora de temas como Blank space, Shake it off o Champagne problems escogió para este evento deportivo un conjunto de color negro formado por un top de tirantes y escote cuadrado tipo corsé así como unos pantalones negros que presumían de aberturas enmarcadas con una hilera de pequeñas aplicaciones brillantes.

No faltaron, por supuesto, sus carismáticos labios rojos, los cuales destacó al llegar su cabello recogido en una coleta de la que nacían dos pequeñas trenzas laterales. Como accesorios, unos pendientes rojos en forma de corazones y una ristra de finos collares al cuello entre los que se podía ver uno con un colgante que representaba la forma del número 87, el dorsal de Travis Kelce con los Chiefs.

El esperado beso entre Taylor Swift y Travis Kelce

Al término del partido, el cual se saldó con un marcador de 25-22 a favor de los Kansas City Chiefs, se produjeron las imágenes más buscadas: el esperado beso entre la pareja del momento.

Tras recibir las felicitaciones de su madre, Travis Kelce se fundió en un lrgo abrazo con la que es su compañera desde antes del verano, Taylor Swift, quien bajó al terreno de juego a apoyar a su chico a pesar de las decenas de cámaras que allí se encontraban para captarlo todo y hacer que esas imágenes dieran la vuelta al mundo en cuestión de segundos.

"Está reescribiendo los libros de historia", decía el deportista hace unos días cuando fue su novia la que triunfó en la gala de los Grammy llevándose dos galardones a casa. "Le dije que ahora yo tendría que cumplir con mi parte del trato y volver a casa con el trofeo también", explicó Travis Kelce, quien sin duda cumplió el acuerdo que tenía con Taylor Swift al vencer con su equipo.