¿Son las ampollas anticaída una buena solución para detener la pérdida de cabello?

El cambio estacional, concretamente el que tiene lugar de verano a otoño o de invierno a primavera, puede afectar directamente a nuestro cabello, que puede ver incrementada su caída de forma inminente. En promedio, se caen entre 1.500 y 6.000 cabellos al mes, entre 50 y 200 cabellos al día, en términos genéricos, dependiendo de la densidad del cabello, la genética o la situación personal -de mayor o menor estrés- en la que nos encontremos, unos datos que pueden aumentar hasta cuatro veces durante este tipo de épocas, según apunta la Dra. Cristina Morante. Entonces, ¿cuándo debe preocuparnos la caída del cabello? "Cuando la caída se produce en mechones o se acompaña de dolor del cuero cabelludo, de picor o eczema es el momento de realizar una visita al experto", señala la propia experta.

A lo largo de los años han visto la luz numerosos tratamientos para frenar la caída del cabello como las pastillas, las vitaminas o, por ejemplo, las ampollas anti-caída. Pero, ¿de verdad funcionan? "Deberíamos distinguir entre las ampollas bebibles y las ampollas anticaída que podemos echar como loción tópica", señala Morante. "Cuando hablamos de una ampolla anticaída bebible fundamentalmente estas ampollas contienen los nutrientes y vitaminas y minerales esenciales que potencian el crecimiento del cabello como pueden ser el zinc, la vitamina D la biotina o el hierro, y debemos ser conscientes de que cuando ingerimos este tipo de complementos no solamente llegan al pelo, sino que se reparten por todo el organismo incluidos órganos vitales que pueden estar también necesitados de este tipo de nutrientes con lo que llegará poca cantidad a la zona en la que esté nuestro objetivo. En esos casos los tratamientos deben ser más largos", explica la doctora.

Ampollas anticaída, ¿de verdad funcionan?

Las dudas sobre la efectividad de este tipo de ampollas para la caída del cabello siguen muy presentes. Aunque cada vez tengamos más información sobre ellas en redes sociales e incluso sean reconocidas figuras o prescriptores los que hablan acerca de este tipo de productos en sus perfiles, el hecho de que sean tan accesibles, o que incluso podemos encontrarlas en el supermercado -Mercadona ha lanzado ampollas anticaída que están arrasando en ventas- y no quieren requieran de ningún tipo de recomendación médica, ni siquiera del consentimiento o consejo de algún dermatólogo tras un informe previo genera miedos y grandes interrogantes.

"Cuando hablamos de ampollas anti-caída tópica tenemos que darnos cuenta de que si no tienen prescripción médica no son medicamentos y, por lo tanto, no tienen posibilidad de llegar en profundidad a realizar efecto", explica la Dra. Morante. "Tendríamos ahí que distinguir entre soluciones médicas y ampollas anticaída que podemos comprar sin prescripción médica y, en consecuencia, no son medicamentos, y cuya acción se ve limitada por, como decíamos, la absorción menor en profundidad de los principios activos que lleva", apunta.

Si queremos estar seguros de que lo que estamos tomando es lo que necesita nuestro pelo, "lo ideal sería hacerlo bajo prescripción médica". Deberíamos acudir a una consulta de dermatólgoo especializado en cuidado capilar y pedir que nos hagan un seguimiento si no queremos que a largo plazo esta decisión se vuelva en nuestra contra. "Muchos pacientes llegan a consulta después de haber tratado la caída durante años con procedimientos sin prescripción médica sin éxito y es debemos tener claro que no todas las personas son iguales ni tienen el mismo tiempo de caída, la alopecia no afecta de la misma forma, por lo que necesitamos de un diagnóstico y de una recomendación médica para tratar adecuadamente nuestro cabello", señala la doctora.