Olvídate del rizador: con este truco, solo necesitas tus dedos para lograr unas pestañas de infarto

Uno de los pasos críticos en cualquier rutina de maquillaje es, sin duda, el momento en el que vas a utilizar el rizador de pestañas. Y es que, este inofensivo instrumento parece fundamental si queremos lograr una mirada de infarto pero, al mismo tiempo, puede darnos más de un disgusto. Y es que, basta un pequeño tirón de más para que puedas arrancar algún que otro pelito. Además, una de las cosas que debes tener siempre en cuenta es que este nunca debe utilizarse después de aplicar la máscara de pestañas, ya que, estas podrían quedarse pegadas al instrumento con más facilidad y, por tanto, es más probable que puedas crearte por accidente alguna que otra indeseada calvita. Eso sí, por muy catastrofistas que nos estemos poniendo, la mayoría de las veces lo utilizamos sin ningún problema y, de hecho, hay auténticas adictas que afirman que no pueden vivir sin él.

Es cierto que con este logramos una curvatura ideal que es muy difícil de conseguir de otra manera... O eso pensábamos hasta ahora, porque una conocida ‘influencer’ ha compartido su truco infalible para lograr unas pestañas curvadas hasta el infinito sin tener que recurrir al rizador. La experta en cuestión es Rocío López y, según explica en su ‘reels’ de Instagram, ella llegó a «quedarse calva tras un accidente con el rizador de pestañas» y que, ahora, ha descubierto un ‘tip’ para prescindir de él y que, además, funciona con cualquier máscara.

El truco para curvar las pestañas sin rizador

Lo primero que deberías de hacer, según esta técnica, es aplicar la máscara tal y cómo lo hagas de forma habitual. De hecho, si te das dos capas, puedes hacerlo sin problema. Una vez hayas completado este paso, debes dejarlas secar durante unos 20 segundos. Tras esto, debes ayudarte de tus dos dedos índices para elevar las pestañas, manteniéndolas hacia arriba, de tal forma que ejerzas presión justo por debajo. Lo ideal es que las sostengas así durante unos 30 segundos, para que el efecto sea más duradero. Tal y como explica «te mancharás los dedos, pero no te manchas el párpado porque, eso sí, puedes evitarlo».

La verdad es que, a la vista de los resultados, estamos impactadas. Además, como editora de belleza, no podía esperar para ponerlo en práctica y lo cierto es que tengo que confirmar que, por increíble que pueda parecer, este ‘hack’ sí que funciona.