Estos son los errores de maquillaje que debes evitar a partir de los 40

El hecho de cumplir 50 no implica que tengas que cambiar toda tu rutina y que, ahora, debas aprender una nueva forma de maquillarte. Es más, los expertos señalan que esta es la etapa en la que te sientes mejor contigo misma, porque sabes lo que quieres y cómo lo quieres y, en lo que a materia ‘beauty’ se refiere, conoces a la perfección lo que te favorece y lo que no. Sin embargo, con los años hay una verdad objetiva y es que, aparecen ciertos signos de la edad que el maquillaje puede, o bien camuflar o, por el contrario, sacar a la luz. Así que, para evitar esto último, lo mejor es que tengas en cuenta algunos de los errores más comunes, en los que solemos caer todas y que –por mucho que cueste reconocerlo– nos suman años.

No preparar tu piel

La hidratación es fundamental siempre pero, a partir de cierta edad, esta máxima se hace todavía más obvia. Es importante que nuestra piel esté lo más jugosa posible ya que, de lo contrario, el maquillaje puede intensificar los signos de la edad, porque terminará cuarteándose y acumulándose en las arruguitas y líneas de expresión. Por eso, recuerda cumplir con tu rutina de ‘skincare’ y, además, hacerlo en el orden correcto.

Utilizar una base demasiado pesada

Tendemos a pensar que es mejor utilizar una base que cubra pero, todo lo contrario, por la misma razón que la del punto anterior. En estos momentos, lo mejor es apostar siempre por la naturalidad y, cuanto más mate y pesada se vea nuestra base, más años nos va a sumar. Por eso, te recomendamos optar por productos ligeros y con una gran proporción de agua en su formulación.

Abusar de los productos en polvo

El efecto mate es tu enemigo: este es un mantra que debes seguir (casi) a rajatabla. Así que, trata de no utilizar demasiados productos en polvo porque sólo conseguirás marcar cualquier imperfección que puedas tener. Si utilizas productos en crema, podrás manejarlos mejor y tu rostro se verá mucho más luminoso y fresco.

No fijarte en el tono del colorete

Puede parecerte una tontería pero el color que elijas para tu ‘blush’ juega un papel muy importante en el resultado final. A partir de este momento, es posible que tu piel tienda a parecer más apagada, así que, tonos como el rosa tendrán un efecto rejuvenecedor inmediato. Trata de evitar los tintes con matices marrones.

Delinear el ojo por dentro

Es probable que empieces a tener más arruguitas y, poco a poco, los párpados van cayendo, así que, con el paso del tiempo, los ojos tienden a parecer más pequeños. Si a eso le sumas un negro intenso en la línea de agua, ese efecto se va a intensificar y tu mirada va a parecer mucho más cansada. ¿En su lugar? Prueba con un ‘eyeliner’ difuminado.

Aplicar sólo sombras ‘shimmer’

Nos encanta el efecto ‘bling bling’ pero te recomendamos que recurras a él en pequeñas dosis. Es decir, pon un poquito en la zona del lagrimal para iluminar o dar un toque de luz en el interior del párpado, pero cuidado con pasarte porque las partículas brillantes pueden encontrar en los pliegues del párpado la mejor zona para asentarse, resaltándolos aún más. ¿Tu mejor aliado? Las sombras beige satinadas.