Blanca Suárez y su impactante eyeliner brillante revolucionan el Festival de Málaga

Ha empezado fuerte la alfombra roja de la 25 edición del Festival de Cine de Málaga. Ya en la gala inaugural brillaron con luz propia mujeres como Marta Nieto, María León o Milena Smit, que nunca defraudan en este tipo de eventos, y en el primer día del certamen, Blanca Suárez ha centrado la atención de los focos. La actriz ha acudido a la capital de la Costa del Sol a presentar su última película, El test, el mismo día en el que se ha proyectado Alcarràs, la película de Carla Simón ganadora hace unas semanas del Oso de Oro en la Berlinale.

Blanca siempre deja su impronta en las alfombras rojas con algún detalle de estilo sorprendente. En esta ocasión también ha sido así, pero los dos beauty looks que nos ha regalado eclipsan al menos en parte, a la ropa. Ambos obra de Natalia Belda, recuerdan al estilo del personaje de Maddie en Euphoria, la serie que más ha revolucionado e influencia a tenido en el universo del maquillaje en los últimos años. "Decidimos mantener piel y ojos prácticamente al natural, pero con un eyeliner gráfico a base de strass único", explica la maquilladora, que dibuja dicho eyeliner más allá de la órbita del ojo, profundizando así en la mirada de la actriz, tal y como hace Doniella Davy con el personaje interpretado por Alexa Demie en la citada serie.

Junto a la oscuridad pronunciada en la zona de los ojos, es clave el contraste que aporta la base cálida. Dice Belda que esta juega "con los nuevos polvos (de Guerlain) tanto para dar color como para marcar volúmenes, aplicando el color bronce tanto en los pómulos como bajo la mandíbula".

El resultado final es "sencillo a la vez que impactante", exactamente el objetivo que se había propuesto Natalia Belda para acompañar el vestido fantasía de la colección otoño invierno 2021-2022 de Antonio Grimaldi que Blanca Suarez ha lucido en la sesión nocturna del festival y por el que ha recurrido también a un punto de luz en el párpado inferior, casi junto al lagrimal.

No podemos dejar de mencionar el estilismo diseñado por Freddy Alonso para Blanca Suarez. Sobre todo, el citado vestido de Antonio Grimaldi. Negro, con larga cola, mangas hiperabullonadas y semitransparentes, aplique de hojas en altura desde los hombros, y cuerpo mini donde dominan las curvas y, en consecuencia, el movimiento, es una de esas piezas que quedan en la memoria.

Transparencias y mirada años 70

Nada que ver tiene este look con el que Blanca ha lucido en la sesión matinal del festival, donde ha mostrado su lado más urbano e informal. El maquillaje ha sido de nuevo protagonista gracias a Natalia Belda, que ha puesto a prueba la fórmula con la que ha triunfado horas más tarde en la alfombra roja. Esto es, una base que enfatiza la tez blanca, natural y brillante y protagonismo centrado casi en exclusiva en la mirada.

En esta ocasión, cuenta la maquilladora que primero "se aplicó la misma base de maquillaje sobre el párpado para unificar el color y crear una base que resaltara más el azul" y sobre este dibujo en un tono gris azulado la sombra de ojos en el rostro de Blanca, de nuevo llevada hasta el infinito. Ademas, "para jugar con las intensidades y que no quedara plano jugué también con un lápiz negro junto a la raíz de las pestañas, también difuminado, para crear una mirada muy estructurada", concluye Natalia Belda.

Un semirecogido muy alto y pulido completa la propuesta de la madrileña, que se combina de maravilla con el outfit casual que ha llevado Blanca. Unas botas con suela track en clave XL color negro junto a un anchísimo pantalón de pinzas en color azul cielo y un arriesgado body semitransparente con estampado de aire sesentero que presumía de escote 'of the shoulder' firmado por Coperni Paris.