¿En qué consiste la tendencia 'Blush Lifting' que quita años gracias al efecto lifting del colorete?

¿Alguna vez has pensado que existe la posibilidad de esculpir tu rostro utilizando colorete? Aplicar rubor en las mejillas ha evolucionado en una tendencia revolucionaria conocida como 'Blush Lifting', la cual no solo otorga un toque de color saludable al cutis, sino que también proporciona un efecto lifting que rejuvenece la apariencia. Esta tendencia de belleza va más allá de la simple técnica de color, transformando el colorete en una herramienta esencial para esculpir y realzar las características faciales.

Según la maquilladora experta Cristina Lobato, "el colorete ya no se trata solo de añadir color al rostro para lograr un aspecto saludable. Ahora, su función va mucho más allá, usándose para crear dimensión en los pómulos y esculpir el rostro". La técnica del 'Blush Lifting' implica un proceso meticuloso que combina tres productos clave para lograr resultados sorprendentes: polvo bronceador,iluminador y, por supuesto, el colorete.

La triada: bronceador, iluminador y colorete

Crear el perfecto efecto 'Blush Lifting' y realzar las facciones requiere la combinación precisa de tres productos esenciales:

Bronceador: Este polvo de tono similar a la piel actúa como una herramienta de sombreado que agrega profundidad al rostro. Aplicado desde la mitad del pómulo y dirigido hacia la parte alta de la oreja, el bronceador crea la ilusión de pómulos más definidos y elevados. La elección del tono adecuado, uno que sea bronceado pero natural y que complemente el subtono de la piel, es esencial para un aspecto armonioso y natural. Los legendarios polvos bronceadores Terracotta de Guerlain (36,99 € en Sephora) , con un 96 % de ingredientes de origen natural entre los que destacan los pigmentos minerales y los nácares. Su textura se funde al instante con la piel garantizando un perfeccionador efecto buena cara.

Iluminador: Para lograr un aspecto más joven y radiante, el iluminador es clave. Se recomienda optar por una fórmula en crema, ya que se integra de manera más fluida con la piel, brindando un aspecto natural y luminoso. Al aplicar el iluminador en los puntos estratégicos del rostro, como el arco de Cupido y los pómulos, se agrega dimensión y se resalta la estructura facial. Y el iluminador Make Me Glow, de essence, es uno de los más fáciles de aplicar gracias a su textura aterciopelada (4,89 en Druni).

Colorete: Aunque el colorete solía ser simplemente un toque de color, ahora desempeña un papel vital en el 'Blush Lifting'. Aplicado en la parte inicial del pómulo, ligeramente alejado de la nariz, el colorete agrega color y luminosidad a la piel. La clave para lograr un aspecto natural es aplicar el colorete de manera suave y delicada, como si estuvieras acariciando la brocha sobre la piel. El Colorete The Blush de 3ina tiene un precio de 14,96 € en Primor.

Paso a paso para realizar el Blush Lifting

1. Comienza aplicando un iluminador en crema después de haber aplicado la base de maquillaje. Opta por una fórmula líquida, ya que se integra de manera más natural con la piel.
2. Aporta dimensión al rostro utilizando un bronceador. Aplica el bronceador desde la mitad del pómulo, justo debajo del hueso, y difumina hacia la parte alta de la oreja. Escoge un tono de bronceador que sea natural y esté en sintonía con el subtono de tu piel.
3. Agrega el toque final con el colorete, aplicándolo en la parte inicial del pómulo, a una distancia moderada de la nariz. Opta por colores que combinen color y luminosidad para obtener un aspecto jugoso y radiante. Aplica el colorete con suavidad, creando un aspecto de rubor natural.

Los tips de Cristina Lobato para multiplicar el efecto Blush Lifting

1. Dos tonos de colorete en la misma gama de color: Aplicamos el tono más claro en la zona central del pómulo y el más oscuro en la zona más cercana a la oreja y a la sien para realizar un contouring muy natural.
2. Utilizamos siempre tonos que se adapten muy bien al subtono de la piel. Para pieles frías, rosados o melocotón; pieles cálidas, marrones, ocres, bronces, naranjas o corales.
3. La elección del colorete va en cuestión de gustos pero lo más deseable es que quede muy natural en el rostro. "La idea es aplicar el colorete de modo que dé un toque de color, lo más similar posible a cuando nos ruborizamos de forma natural", puntualiza la maquilladora.
4. Las brochas biseladas son las mejores para aplicar el colorete.
5. El colorete en crema se puede aplicar con una esponja tipo Beauty Blender en tamaño mini, son perfectas para dar un toque sutil de color en las mejillas. Una buena opicón para verano, si no llevas base de maquillaje, es aplicar el colorete en crema con la esponjita ya que se funde mejor con la piel que el polvo y queda mucho más natural.