Marta Ortega o cómo acertar con el fucsia como invitada a una boda

La creativa de Inditex ha vuelto a dar una lección magistral de estilo con su elección para acudir al enlace de Carlos Cortina y Carla Vega-Penichet.

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Si en la temporada de bodas de primavera la diseñadora Inés Domecq se coronó como la invitada más elegante de forma incontestable, Marta Ortega lo es de la temporada de este tipo de celebraciones este verano.

La creativa de Inditex nos ha dejado por tercera boda consecutiva con la boca abierta con otro look de invitada ideal. No lo tenía fácil la hija de Amancio Ortega porque competía contra sí misma después de los dos estilismos que lució tanto en la boda de Pedro Bravo y Carlota Pérez-Pla a finales de julio como de Amelia Millán y Felipe Cortina dos semanas después, en pleno mes de julio.

No se parece en nada ni el color ni las prendas con las que Ortega ha confeccionado el look para asistir al enlace de Carla Vega-Penichet y Carlos Cortina, hermano del mencionado Felipe Cortina e hijo del empresario Alfonso Cortina, fallecido el pasado mes de abril víctima de la COVID-19.

Después de sorprendernos con un slipdress combinado con un jersey de punto calado en tonos marrones y posteriormente con un espectacular vestido joya, ambos outfits con el sello de Valentino, la empresaria ha optado en esta ocasión por otra pieza de Pierpaolo Piccioli este vez en color fucsia, un color complicado porque puede funcionar muy bien en los diseños para invitadas de boda si se escoge en pequeñas dosis pero no en grandes... salvo si es con un estilismo como el que ha escogido la hija de Amancio Ortega.

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La tonalidad escogida por Marta Ortega tiene muchas virtudes pero al mismo tiempo es un reto notable para quien lo luce porque puede resultar excesivo a poquito que no se acierte con los complementos, los accesorios e incluso con la pieza principal.

Pero como no podía ser de otro modo, la heredera del Inditex ha demostrado una vez más su exquisito buen gusto para la moda con una lección magistral de estilo redoblando su apuesta por este intenso rosa al darle el protagonismo de su look de invitada en exclusiva.

Marta Ortega ha elegido un pieza tan especial que es difícil de catalogar. Se trata de un vestido con una parte superior tipo camisa XL con detalles como los puños y el cuello pero que también conecta a simple vista con los batines más sofisticados, especialmente por el largo hasta los tobillos, el cierre con lazo en la cintura y el corte completamente abierto en su parte delantera por el que se destaca la falda. Un diseño que te sonará porque menos de 24 horas fue Zendaya quien la lució en su versión en negro y blanco a su llegada al Festival de Venecia con una blazer oversize por encima.

Un body interior a juego y unas sandalias fucsia con tacón alto y ancho transparente además de una impresionante gargantilla han completado otro look de matrícula de honor de Marta Ortega, que ha puesto la guinda con un recogido que centraba todo el protagonismo en el vestido y la citada gargantilla.

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La noche anterior a la celebración del enlace entre Carlos Cortina y Carla Vega-Penichet, para la preboda, Marta Ortega ya había dejado su sello en Jerez de la Frontera, ciudad elegida por los novios para celebrar su matrimonio.

Lo había hecho con un homenaje al verano que se acaba y también a las novias al apostar por un outfit completamente blanco. Lógicamente, esto es una simple interpretación porque no sabemos si había doble intención en la elección del blanco para una preboda por parte de la empresaria, pero lo que está fuera de toda duda es la clase que derrocha en cada aparición pública.

En esta ocasión fue un vestido de escote cuadrado y doble tirante confeccionado en gasa con volantes decorando todo el cuerpo de la pieza que bien podría ser la elección de una novia para el día de su enlace en caso de querer alejarse de los diseños canónicos sin renunciar al blanco.

Un bolso de mano a juego y unas sandalias planas con tachuelas también en blanco fueron los complementos escogidos por Ortega para acompañar al vestido.