Todo lo que debes saber sobre la barra libre de tu fiesta de boda

A la hora de pensar en contratar la barra libre es importante tener en cuenta una serie de aspectos destacados. Así, recordad que, normalmente, los precios que os ofrece el lugar de celebración del banquete o el catering son muy competitivos, y que la mayoría de restaurantes y hoteles ya incluyen la barra libre en sus servicios. Sin embargo, hay profesionales de la coctelería que se dedican exclusivamente a ello y que podéis contratar el día de la boda. De este modo, la variedad de bebidas, cócteles y combinados que tendrán vuestros invitados será mucho mayor. Y no solo eso, sino que los resultados también serán mucho más elaborados. En el portal de Bodas.net encontraréis interesantes y variadas propuestas para todos los gustos y bolsillos.

Una barra libre muy original

Una forma de personalizar la barra libre es ofrecer un cóctel especialmente diseñado para la ocasión. Pedid consejo a la empresa de catering: sin duda os podrá dar buenas ideas. Podéis disponer la receta en pequeñas tarjetas impresas con vuestra firma para que los invitados puedan llevársela a casa. También podéis imprimirla en servilletas de 'cocktail', o poner una pizarra en la barra con los ingredientes utilizados. Para que ningún invitado se lo pierda, pedid a los camareros que lo sirvan por la sala, durante la fiesta, ofreciéndoselo a todo el mundo.

La barra libre puede estar disponible hasta altas horas de la madrugada si así lo concertáis con el local en el vayáis a celebrar el enlace. Eso significa horas y horas de baile y bebida, que conviene complementar con algo de comer. Por ello, cada vez más novios optan por acompañar la barra libre con diferentes tipos de dulces o aperitivos. Entre las distintas opciones encontramos los 'candybar', los 'cupcakes', los 'macarons' y, dependiendo de la hora del día, la recena o merienda, que puede incluir sandwiches, pizza en porciones, hamburguesas o 'frankfurts'.

¿Cuánta bebida se necesita?

Otro aspecto importante que también debéis tener en cuenta es la cantidad de copas que se pueden servir dependiendo del tipo de bebida:

1 botella de vino = 4 copas

1 caja de vino = 6 botellas

1 caja de cerveza = 24 botellas

1 botella de licor de 750 ml = 17 chupitos

1 barril de cerveza = 160 copas

Si, por ejemplo, tenéis 100 invitados adultos, algunos beberán cerveza, otros preferirán el vino y otros cava o champán. Por regla general, se cuenta una bebida por persona y hora, como media. Sin embargo, está claro que algunas personas beberán más y otras menos. El bar debería componerse de la siguiente manera:

Una tercera parte de cerveza

Una tercera parte de vino

Una tercera parte de licores

Una botella de cava o champán por cada 7 invitados.

Siguiendo esta guía debería haber bebida de sobra para todos los invitados.

En cuanto al servicio, lo mejor es contar con un camarero por cada 50 personas. Si la fiesta es grande y tenéis muchos invitados, lo mejor que que haya dos barras para evitar que se formen colas.

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