Los mejores y peores vestidos de la Coronación de Carlos III, de más a menos (de Letizia a Charlene)
La reina Letizia se ha coronado como la mejor vestida de la coronación de Carlos III gracias a un sencillo, pero elegantísimo vestido de Carolina Herrera y una original pamela XXL hecha en España en exclusiva para ella. Repasamos todos los looks entre los que destacan Lady Helen Taylor, por supuesto, la princesa Charlotte y Zara Tindall.
Letizia, de Carolina Herrera y pamela de Balel, la más elegante
La reina fue sin duda la invitada más elegante en la Coronación de Carlos III. Letizia cautivó a todos con un dos piezas rosa de Carolina Herrera con falda midi de corte recto y una chaqueta peplum. Su llamativa pamela en rafia con redecilla de la firma Balel fue todo un acierto.
Lady Helen Taylor, elegancia
Lady Helen Taylor brilló de Dior, con un look de la colección crucero que se presentó en Sevilla, durante la coronación de Carlos III.
Pippa Middleton, de nuevo entre las mejor vestidas
Pippa Middleton asistió junto a su hermano James Middleton a la coronación de Carlos III y lució un vestido abrigo 'Alais' de Claire Mischevani en un tono amarillo a medida, combinado con un tocado a juego de Jane Taylor.
Charlotte, de Alexander McQueen
La princesa Charlotte vistió de blanco de Alexander McQueen para asistir a la coronación de Carlos III. La pequeña real coincidía con su madre, la princesa de Gales.
Zara Tindall, entre las más elegantes
Zara Tindall asistió a la coronación del rey Carlos III en la Abadía de Westminster en Londres, con un traje minimalista. Tindall lució un vestido abrigo firmado por Laura Green emn color azul personalizado con cinturón en la cintura.
Mary de Dinamarca
Mary de Dinamarca asistió con vestido vaporoso en tono burdeos con escote en V a juego con los guantes y el tocado,
Sophie de Liechtenstein
Sophie de Liechtenstein, con un traje y tocado a juego en tonos fucsia.
Los Reyes de Bhutan
La reina Jetsun Pema de Bhutan, espectacular con un traje típico.
Jill Biden, y su nieta Finnegan Biden
Jill Biden, y su nieta Finnegan Biden, figuran entre las más elgantes de la coronación de Carlos III.
Marie-Chantal, apuesta segura
La princesa heredera Marie-Chantal eligió un vestido personalizado azul bebé de la diseñadora griega Mary Katrantzou.
La reina Suthida de Tailandia
La reina Suthida de Tailandia, muy elegante con un traje tradicional de su país.
La novia Máxima, impecable
La reina Máxima lució un vestido blanco a medida del diseñador holandés Jan Taminiau.
La duquesa Sofía de Edimburgo y Lady Louise Windsor
El príncipe Eduardo y la duquesa Sofía de Edimburgo llegan con Lady Louise Windsor (derecha) y el conde de Wessex (izquierda) a la Abadía de Westminster.
Rania de Jordania, de alta Costura
La reina Rania de Jordania lució un vestido color crema de manga larga de alta costura de Tamara Ralph. El vestido de silueta lápiz, una de las que mejor le sienta, está hecho en crepé de seda con cuello de lazo estructurado fuera del hombro y mangas ligeramente transparentes. Rania completó su look con un bolso de mano de Bottega Veneta y zapatos de taJimmy Choo.
El azul de Victoria de Suecia
La princesa heredera Victoria de Suecia apostó por un sobrio look en azul eléctrico.
Mathilde de Bélgica, todo al rosa
Mathilde de Bélgica apostó por un vestido en color rosa pastel y capa.
Maria Teresa de Luxemburgo
El duque Henri y la duquesa Maria Teresa de Luxemburgo.
El burdeos de la princesa Beatrice
Beatrice lució un vestido burdeos fuerte con mangas abullonadas y un cinturón incorporado. Elevó aún más el look con una diadema dorada y un bolso de mano a juego, con zapatos de tacón de ante beige, pulseras y anillos dorados y pendientes de aro con zafiro rosa, rubelita y ópalo rosa, de Garrard.
Mette-Marit de Noruega, traje hecho a medida
La princesa heredera Mette-Marit de Noruega lució un vestido de Peter Dundas rosa claro hecho a medida.
Katy Perry, muy sonriente en la abadía de Westminster
Katy Perry no acertó con el vestido ni la pamela XXL.
Margarita de Rumanía, todo al blue
La tristeza de Charlene
Charlene escogió un dos piezas en color beige muy poco favorecedor para su estilo, aunque la chaqueta era muy original e incorporaba una capa. Su tocado minimalista no disimulaba la expresión de tristeza que acompañó a Charlene durante la ceremonia de Coronación de Carlos III.