Meghan Markle sabe cuál es el escote más favorecedor
Junto al príncipe Harry ha presidido la gala de inauguración de los Invictus Games y sus looks han vuelto a convertirse en el centro de todas las miradas.
El príncipe Harry y Meghan Markle están disfrutando de su vuelta a Europa —tercera vez para el sobrino de la reina Isabel II y primera para su mujer desde su mudanza a Estados Unidos— con motivo de la celebración de los Invictus Games en La Haya, Países Bajos. Esta competición en la que participan veteranos y heridos de guerra de distintos países fue creada por el propio Harry hace ocho años, de ahí que esté siendo el gran protagonista del fin de semana en la ciudad neerlandesa… con permiso de Meghan.
La actriz norteamericana está centrando todas las miradas desde que apareció por primera vez en público el viernes por la tarde en el estadio Zuiderpark. Desde entonces, no se ha quitado la sonrisa del rostro y, sobre todo, no ha dejado de brillar gracias a su exquisito armario. Entonces ya lo demostró con un dos piezas blanco de Valentino impecable. Y este sábado ha hecho lo propio por partida doble.
Por un lado, con un look informal muy royal, no tanto por la camiseta blanca clásica o los sencillos vaqueros tobilleros de Chanel sino por las bailarinas bicolor de la firma parisina y la chaqueta de tweed de Celine, dos detalles con los que marca la diferencia en un outfit que podríamos firmar, con prendas de marcas más económicas, cualquiera.
La declaración de amor de Meghan a Harry
De esta guisa ha asistido Meghan a una competición de minicoches en la que también ha participado. Cómoda y elegante, característica esta última de la que no ha perdido ni un ápice con el estilismo elegido para la inauguración de la competición deportiva en la que se ha mostrado especialmente cariñosa con el príncipe Harry durante su intervención.
"Tengo el distinguido honor de presentarles a quien les entusiasmará escuchar. Ha pasado muchas noches y madrugadas planificando estos juegos para que sean lo más perfectos posible para cada uno de vosotros. No podría amarlo y respetarlo más y sé que muchos de vosotros sentís lo mismo porque es vuestro compañero y el padre de nuestros dos pequeños, Archie y Lili. Den la bienvenida a mi increíble marido, el príncipe Harry, el duque de Sussex", ha dicho la exactriz sobre el escenario antes de fundirse ambos en un beso.
No le ha hecho falta a Markle recurrir al vestido, como sí hizo en su primera aparición pública de este año allá por febrero. Le ha bastado para conquistarnos a todos de nuevo con una combinación black&white en la línea de la que la formada por un pantalón negro minimalista y un top blanco de escote bardos realmente especial, una de esas prendas que, una vez más, marcan la diferencia.
Se da la casualidad, y no es la primera vez, que Meghan y la reina Letizia han vuelto a coincidir en detalles de estilo. Y esta vez, el mismo día. Ya en su día llevaron hasta la misma falda de Boss. Esta vez, la reina ha visitado el CREADE, centro público que atiende a los refugiados ucranianos en Pozuelo (Madrid), con una combinación de colores igual que Meghan pero a la inversa: pantalones blancos y blazer y camiseta negra.
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