Qué es el serraceno y por qué es la alternativa más saludable al trigo

En la búsqueda constante de ingredientes saludables y alternativas nutritivas para mejorar nuestra dieta, parece que la lista de superalimentos nunca termina por completarse. En ella encontramos desde productos tradicionales como el pescado azul a otros que, pese a que en otras culturas son comunes, aún no parecen formar parte de nuestro día a día, como pueden ser los famosos dangmyeon (un tipo de fideos, muy utilizados en la cocina asiática). Ahora, uno de los últimos virales, es el serraceno, que reclama su merecido puesto entre los imprescindibles ‘foodies’ y que, por sus propiedades, puede ser considerado como un auténtico tesoro nutricional.

Originario de las regiones montañosas de Asia Central, el serraceno, también conocido como trigo sarraceno, no solo es versátil y delicioso, sino que también ofrece una serie de beneficios para la salud que lo convierten en un alimento esencial en la dieta de cualquier persona preocupada por su bienestar. Además, pese a que su nombre pueda confundir, el serraceno no está relacionado con el trigo en absoluto. En realidad, se trata de una semilla, no de un cereal, y se asemeja más a las espinacas o la remolacha. Sin embargo, se suelen comparar ambos debido a su similitud, tanto en su aspecto como en sus usos culinarios. Sin embargo, a diferencia del trigo, que contiene gluten y puede causar problemas de intolerancia en algunas personas, este no está presente en el serraceno, lo que lo convierte en una excelente opción para aquellos que siguen una dieta sin gluten.

Beneficios del Serraceno en tu Dieta

Si hablamos de todas sus bondades, tenemos que empezar diciendo que es una fuente rica en vitaminas del grupo B, magnesio, hierro, y antioxidantes como el flavonoide rutina, todos ellos, esenciales para la salud del corazón y el sistema nervioso. Además, contiene proteínas de alta calidad, que proporcionan todos los aminoácidos esenciales, y es una excelente fuente de fibra soluble, que promueve la salud del sistema digestivo y ayuda a mantener los niveles de azúcar en sangre estables. Por otro lado, la fibra que contiene te ayudará a sentirte satisfecha por más tiempo, lo que puede ayudar a controlar el apetito y reducir el consumo de calorías.

Afortunadamente, incorporarlo a tu dieta es muy sencillo. Debes tener en cuenta que puedes encontrarlo tanto en grano (perfecto para utilizarlo como guarnición y en ensaladas), como en forma de harina (sustituyendo a la harina de trigo en todo tipo de recetas) y a modo de copos (ideales para hacer avena).