Así es el nuevo coche con el que la princesa Leonor se ha estrenado al volante: todos los detalles

Durante la tarde de ayer, martes 6 de agosto, pudimos ser testigos de probablemente las imágenes más sorprendentes del verano: la princesa Leonor conduciendo por primera vez en Mallorca. O por lo menos ante las cámaras. La heredera al trono apareció sentada al volante de un coche que ella misma iba conduciendo por las calles de la isla balear y con parte de la familia real montada en dicho vehículo. Mientras que su hermana, la infanta Sofía, ejercía de copiloto, la reina Letizia y la emérita Sofía permanecían en los asientos de atrás, disfrutando de la novel aunque responsable conducción de Leonor.

Desde hacía ya varios meses se especulaba que la princesa Leonor se habría sacado el carnet de conducir en la Academia General Militar de Zaragoza, la que ha sido su hogar durante el último curso, puesto que era obligatorio para su formación militar. Y ahora que parece que ha aprobado sus exámenes, ya puede presumir de su permiso, ¡y de coche nuevo!

El coche nuevo de la princesa Leonor

A través de dichas imágenes que se captaron durante la calurosa tarde de ayer, hemos podido comprobar que el coche que conducía la princesa Leonor era un coche prácticamente de estreno, un modelo de la marca española SEAT. Concretamente, se trata de modelo Ateca, en color gris metalizado, que sin duda es uno de los más vendidos dentro de la marca. Un coche que cuenta con todas las características necesarias tanto por fuera como por dentro para una conducción fácil y cómoda: volante calefactado, GPS con pantalla, así como un diseño moderno y urbano.

Lo que aún desconocemos es si este coche pertenece a la Familia Real, y más concretamente a la princesa Leonor, o si será de uso exclusivo para su estancia en Palma.

Otro SEAT en la Familia Real

Una vez cumplida la mayoría de edad, el pasado mes de octubre, y cuando se conoció que la princesa Leonor se estaría sacando el carnet de conducir, se especuló sobre un coche que la heredera podría heredar. Hablamos del SEAT Ibiza que heredó su padre, una versión muy especial del modelo de la época que incluye una personalización propia con un color dorado (que entonces no existía), un motor potenciado por Porsche con 100 caballos y un sistema que le permitía retrasar aún más el asiento del conductor, pues el entonces Príncipe Felipe y sus 1,97 metros de altura no cabían al volante.

Aunque ahora se encuentra cedido al museo de la marca, sabemos que se encuentra en perfecto estado y listo para salir a las calles (aunque no las del centro) de Madrid. No nos extrañaría que la princesa Leonor recurriera a utilizar este coche en alguna ocasión.