La gala de los Premios Goya 2023: emoción y pocas reivindicaciones

Los preciosos versos de Antonio Machado (‘Caminante no hay camino’), interpretados por Manuel Carrasco dieron comienzo a la gala de los 37 Premios Goya, que esta vez tenían a Sevilla como imponente escenario. Y enseguida llegó el momento más emotivo de la noche: el homenaje al director Carlos Saura, fallecido ayer, a los 91 años, lo que le imposibilitó recoger su Goya de Honor esta noche.

La actriz Carmen Maura recuerda la primera peli que hizo con el gran director, ‘Ay Carmela’: “Fue un director maravilloso, simpático, cotilla, amoroso y me apena no haberle podido decir la marca que me dejó como actriz”, contaba, emocionada. Enseguida subieron a recogerlo sus hijos, Antonio y Anna, tras dos minutos de aplausos ininterrumpidos y todo el auditorio en pie. “Nuestro padre se fue ayer, después de demostrarnos que hay que vivir apasionadamente, que la imaginación no tiene límites y la cultura lo más importante, hay que potenciarla, sin ideologías ni colores, porque es nuestro legado y nuestro futuro. Él luchó por ella y ha sido un ejemplo de vida para todos los que nos dedicamos al arte, para todos los maravillosos directores y directoras de hoy. Gracias, papa”. Por su parte, su hijo Carlos destacó la importancia de sus cuatro mujeres, que le influyeron mucho en su obra y le hicieron la persona que fue. Su última mujer, que estuvo junto a él los últimos 30 años, la actriz Lali Ramón, leyó sus últimas palabras.

Otro de los momentos emocionantes fue el Goya al Mejor Actor Revelación, que fue a parar a Telmo Irureta, actor que ha debutado en el cine para disipar las barreras de la discapacidad, además de las arquitectónicas: “Estoy noqueado. Fernando Franco, nuestro querido director, gracias por esta oportunidad. Gracias a David, mi personaje, un guiño a la sexualidad en las personas con discapacidad, porque nosotros también existimos y también follamos. Por un cine más inclusivo y con cuerpos de todo tipo”, dijo el actor vasco, sobrino de Elena Irureta (‘Patria’).

Susi Sánchez se quedó sin palabras con su segundo Goya por ‘Cinco lobitos’: “Una peli que nos ha dado muchas alegrías, pero también mucha fuerza a las mujeres que la han visto. Es verdad que ya hay muchas más mujeres en esta industria, la participación está creciendo, pero aún faltan puertas por abrir y necesitamos que la mitad del negocio, vosotros compañeros, nos las abráis. Hasta ahora se nos han abierto las de la cocina y las del dormitorio. Esperamos que nos ayudeis a abrir muchas más”, reivindicó la actriz.

Preciosa fue la presentación de la directora Isabel Coixet del Goya Internacional a toda su extraordinaria trayectoria y su apuesta por autores arriesgados, plasmada en un buen número de interpretaciones inolvidables, la de la actriz francesa Juliette Binoche: “Con Juliette he aprendido a no tenerle miedo a tener miedo. A estar alerta siempre, a abrazar la vida sin red. Es la mujer en la que están todas las mujeres. Representa un cine sin fronteras y sin algoritmos, el cine que busca la conexión de las personas sin importar de dónde vengan", explicaba la realizadora catalana. Binoche, por su parte, "Gracias, Isabel, siempre has sido una persona que sabe captar la vida, con amor y humor, me encantó trabajar contigo (en 'Nadie quiere la noche'). El Goya de esta noche no es para mí, es para el fuego que me invade, pero no me pertenece, es esa fuerza que brota, yo solo soy un instrumento de ese ardiente deseo y que debo compartir. No es bastante ser una actriz feliz, hay que dar felicidad, no basta con ser honesta, hay que transmitir honestidad. Hace 40 años que trabajo como actriz y la magia que se sigue produciendo en el rodaje es lo que me impulsa a seguir trabajando", explicaba la intérprete gala.

También fue emotiva el Premio a la Mejor Actriz Revelación, que se llevó la vital Laura Galán por su papel en 'Cerdita', esta vez por el largometraje, dirigido (al igual que el exitoso corto) por Carlota Pereda: "Se lo dedico a todo el 'team peggy' y a todos los chicos y chicas que han sufrido el acoso como mi Sara. Recordad que vosotros no tenéis la culpa, que no hay nada malo en vosotros y en vosotras", decía Laura. Galán ya conoce la experiencia de recoger un Goya, ya que en 2019 el cortometraje 'Cerdita', predecesor del largo homónimo, fue premiado en la categoría Mejor Cortometraje de Ficción. La manchega repite en el papel de Sara, una adolescente a la que acosan un grupo de chicas de su pueblo y que presencia el secuestro de éstas por parte de un desconocido. Además de los inadaptados, muchas de las reivindicaciones y de las llamadas de atención de los participantes y premiados de la gala se dirigió hacia la Sanidad Pública. Y nada hacia la ley del 'Sí es sí'. Por cierto, que muchos de los invitados lucían una chapa en sus solapas que rezaban: 'El corto es cine'.

Fernando Esteso se acordó de Agustí Villaronga, también fallecido hace unos días, justo antes de los Premios Gaudí: "Tuve la suerte de trabajar con él, de descubrir su sentido del humor increíble, patente en 'Loli Tormenta'. Solo espero que tanto Carlos como Agustí tengan un regalo para mí allá arriba, porque más temprano que tarde nos volveremos a encontrar", aseguró el veterano actor.

En la recta final de los premios, Laia Costa, como Mejor Actriz Protagonista, ha revelado que muchos espectadores le han parado por la calle, tras ver 'Cinco lobitos', para decirles que, gracias a esta película, han sentido la necesidad de llamar a sus seres queridos: "Ojalá sirva para que todas esas llamadas se hagan", ha expresado la catalana.

La reunión, 30 años después, de Míriam Díaz-Aroca, Ariadna Gil, Maribel Verdú y Penélope Cruz, protagonistas de 'Belle Epoque', sobre el escenario para presentar el Goya a la Mejor Película, fue un genial broche de oro a la 37 Gala del cine español. 'As bestas' se convirtió en la gran ganadora de la noche, con 9 premios: Mejor Película, Mejor Dirección, Mejor Actor Protagonista, Mejor Actor de Reparto, Mejor Fotografía, Mejor Guión Original, Mejor Sonido, Mejor Montaje y Mejor Música Original.