Celine Dion reaparece de forma inesperada, y por todo lo alto, pese a su enfermedad

La artista participó en el aniversario de Elie Saab, que cumplía 45 años de historia. Jennifer Lopez o Camila Cabello también estuvieron allí.

Céline Dion en la presentación de 'I Am Céline Dion' en Nueva York
Céline Dion en la presentación de 'I Am Céline Dion' en Nueva York / Gtres

El esplendor (con frecuencia, bañado por bordados y pedrería) de Elie Saab, que festejaba este miércoles 45 años de historia con el macroevento '1001 Season of Elie Saab' en Riad (Arabia Saudí), quedó subrayado por el fulgor de sus artistas invitadas. Además de Jennifer Lopez y Camilla Cabello, que actuaron a lo largo de la velada interpretando sus temas más icónicos sobre una pasarela mientras desfilaban maniquíes con looks del diseñador libanés, la gran sorpresa fue Celine Dion, que, resplandeciente con un vestido con capa semitransparente bañado por brillantes de la firma, se subió al escenario para interpretar temas como 'The power of love' o 'I'm alive'.

Muy elegante, con el pelo recogido y un maquillaje dramático en tonos ocre, la artista derrochó chorros de voz perfectos frente a un público atento (y que llegó a levantarse de sus asientos para aplaudir) ante esa mujer que reveló no hace mucho la tortura en la que vivía desde hace dos años a causa de una enfermedad neurológica.

Céline Dion: El anuncio de la enfermedad y su regreso

La enfermedad que padece Celine Dion y que la retiró de los escenarios hace dos años es el Síndrome de la Persona Rígida, que provoca rigidez muscular y espasmos, y que, de momento, es irreversible y no tiene cura, según explicó al dar la noticia hace dos años y anunciar que no se sentía capaz de dar comienzo a su gira por Europa prevista para 2023.

"Desafortunadamente, los espasmos afectan a todos los aspectos de mi vida. A veces me dificultan hasta el caminar y tampoco me permiten usar las cuerdas vocales para cantar como lo hacía antes", explicó sobre esa dolencia que afecta a 1 de cada millón de personas.

En diciembre del año pasado, la preocupación entre los seguidores de la artista creció cuando su hermana Claudette confesó en la una entrevista que Céline Dion "trabajaba duro" pero, sin embargo, ya no tenía "control sobre sus músculos".

"Es cierto que tanto en nuestros sueños como en los de ella el objetivo es volver a los escenarios. ¿En qué calidad? No lo sé. (...) Las cuerdas vocales son músculos y el corazón es un músculo. Esto es lo que me asusta", añadió.

Su actuación, por tanto, el pasado mes de julio en los Juegos Olímpicos de París fue un gran hito así como una muestra de valentía: la canadiense se apoderó del público desde la Torre Eiffel con su talento abrumador y el tema 'Hymne à l'amour' de Édith Piaf. Unas horas más tarde, sin embargo, se divulgaban fotos de la artista con cara extremadamente cansada.

Nuria Roca

Ahora, su nueva actuación vuelve a reconfortarnos un poquito mientras recordamos que 2024 era el año en el que la artista esperaba comenzar a sentir ciertas mejorías y que había prometido "hacer todo lo posible por volver a ser la artista que hasta ahora conocíamos".

"Esto es una lucha. Todo lo que sé es cantar y es lo que he hecho durante toda mi vida y os aseguro que es lo que más amo hacer. Os echo de menos, echo de menos subirme a un escenario y siempre doy el 100 por ciento de mí cuando canto, pero mi condición no me lo permite ahora", explicó en 2023.

Su actuación de este miércoles, al menos, es un buen vestigio.

En qué consiste la enfermedad de Céline Dion

La enfermedad que afecta a Céline Dion y que solo sufren una persona entre un millón en el mundo está catalogada como enfermedad rara. Se trata de una dolencia neurológica progresiva que se caracteriza por episodios de rigidez y contracciones musculares de los músculos, principalmente en los del tronco, los brazos y piernas, que pueden producirse por una sensibilidad incrementada a estímulos externos, como respuesta a un sobresalto. Por ejemplo, un ruido inesperado, un estímulo táctil o el estrés emocional precipitan espasmos, que también pueden producirse de forma espontánea.

Las personas que lo sufren pueden presentar posturas anormales, como encorvados sobre sí mismos, y andares rígidos. Asimismo, son proclives a las caídas debido a los espasmos y la rigidez muscular.

La enfermedad, que afecta en mayor medida a las mujeres que a los hombres (se han contabilizado el doble de pacientes femeninos frente a los masculinos), puede llevar a la discapacidad y rigidez en todo el cuerpo, afectando a la realización de tareas diarias. También es habitual que afecte al estado de ánimo y la salud mental.

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