Conocemos el truco de La Ordenatriz para limpiar la freidora de aire (y queda como nueva)

Las freidoras de aire se han convertido en un electrodoméstico imprescindible en muchas cocinas, ya que permiten cocinar alimentos de manera más saludable. Sin embargo, es fundamental mantenerlas limpias para garantizar su buen funcionamiento y la calidad de tus preparaciones.

Para ello, contamos con la ayuda de la creadora de contenido La Ordenatriz, que ha querido compartir con sus seguidores de Instagram trucos sobre cómo puedes limpiar tu freidora de aire utilizando ingredientes comunes que seguramente tienes en tu despensa. Toma nota de su gran secreto:

"Sólo hay que aprovechar el propio vapor y el poder desegrasante del limón", confiesa. "Si haces esta limpieza con relativa frecuencia tendrás tu freidora como nueva. Pero si se te ha olvidado limpiarla y está todo muy pegado, sustituye el limón por dos vasos de vinagre y añade dos cucharadas de bicarbonato. Conecta la función 'precalentamiento' y cuando acabe deja reposar 6 u 8 horas".

Además, indica que los fabricantes recomiendan que haya al menos 5 cm entre el agua y las resistencias para evitar salpicaduras. Además, señala que no es bueno añadir más agua del indicado: "sólo hasta cubrir la rejilla". Y advierte que la resistencia es la parte más sencilla y delicada.

"Es suficiente con pasar una bayeta con suavidad, ya que el vapor habrá desprendido toda la grasa. No te obsesiones con sacarle brillo, ten en cuenta que la temperatura que alcanza mata todo tipo de gérmenes. Si aún así estás preocupado por la suciedad en esa zona, prueba con piedra blanca y cepillo de dientes", concluye.

Para ello, necesitas reunir todos los materiales: dos vasos de vinagre blanco, dos cucharadas de bicarbonato de sodio, un paño suave o esponja y un cepillo de cerdas suaves. Y por supuesto, no te olvides de desconectar la freidora y desmontarla: Lo primero que debes hacer es desconectar la freidora de aire de la corriente eléctrica y dejar que se enfríe por completo. Luego, desmonta las piezas extraíbles, como la cesta y la bandeja de goteo. Esto facilitará la limpieza y te permitirá acceder a todas las áreas de la freidora.

A continuación, prueba a aplicar el bicarbonato de sodio. Espolvorea las dos cucharadas de bicarbonato de sodio sobre las áreas sucias de la freidora (el bicarbonato de sodio es un agente de limpieza suave pero efectivo que ayudará a descomponer la grasa y la suciedad). Continúa rociando con vinagre, vierte los dos vasos de vinagre blanco en un rociador y pulveriza generosamente las áreas donde aplicaste el bicarbonato de sodio. La combinación del bicarbonato y el vinagre creará una reacción efervescente que ayudará a aflojar la suciedad y las manchas.

El siguiente paso es dejarlo reposar: Deja que la solución de bicarbonato y vinagre repose en la freidora durante al menos 15-20 minutos. Esto dará tiempo a que los ingredientes hagan su trabajo descomponiendo la grasa y la suciedad. Usa un paño suave o una esponja para frotar las áreas donde aplicaste la mezcla de bicarbonato y vinagre. Si encuentras manchas difíciles, un cepillo de cerdas suaves puede ser útil para eliminarlas con suavidad. Asegúrate de prestar especial atención a las áreas más sucias y de difícil acceso.

Después, enjuaga todas las piezas desmontables de la freidora con agua tibia para eliminar cualquier residuo de bicarbonato y vinagre. Sécalas completamente antes de volver a armar la freidora. Una vez que todas las piezas estén limpias y secas, vuelve a ensamblar la freidora. Conecta la freidora a la corriente eléctrica y enciéndela brevemente para asegurarte de que todo funcione correctamente.