Una casa estilo boho
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«Quería una casa fácil de abrir y cerrar, cómoda, con pocas cosas... con sensación de vacío y Víctor, el arquitecto, dio con el concepto. Él ha pensado los espacios, los ventanales grandes, la idea de hacer la casa como dos bloques en una sola planta... Estamos encantadados con el resultado.»
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Un rústico renovadoLa encimera de madera de iroco ha sido realizada a medida por el arquitecto que ha proyectado la vivienda, Víctor Canosa (www.arquivd.cat). El lavabo es de Roca y el grifo, de Hansgrohe. El espejo está montado en un antiguo caballete y los baúles son heredados.
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«He dejado que la casa se integre con la naturaleza del terreno. En cada estancia solo hay un pequeño toque decorativo con fuerza.» Daniela ha dejado que los techos altos, los espacios inundados de luz y la madera de iroco de las puertas y ventanas hablen por sí mismos.»Zona de relaxRincón de lectura en el salón, con una estantería a medida y lámparas de Filipinas. Cesta colgante de Habitat y alfombra y cojines Zara Home.
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Salón abierto a la naturalezaEn este amplio espacio, la luz y el paisaje son los protagonistas. De hecho, Daniela siempre quiso que en su casa no hubiera diferencias entre exterior e interior. El sofá, que mira hacia los dos lados, es de Sluiz, tapizado en Pepe Peñalver y con cojines de Filocolore y Zara Home. El sofá blanco es de La Maison y la mesa de centro, una antigua cama india. Las mesitas y los puff son de Filipinas.
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Escultura de Angelo Piersimoni.
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Cocina integradaTodos los muebles de esta estancia los hizo a medida el arquitecto Víctor Canosa en madera de iroco. Los electrodomésticos son de Ikea y las luces, de IvoCo. Armarios de obra de la despensa con cortinas de KA InternaTional. Encima, cajas antiguas de mercadillos franceses.
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Líneas simplesLa sobriedad de los muebles del comedor resalta la arquitectura de la estancia. La mesa es diseño de Víctor Canosa y las sillas proceden de Sluiz.
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Detalle de la despensa.La propietaria ha empleado las telas de colchas, cojines, tapizados y cortinas para aportar calidez a los ambientes. Los tonos crudos, malvas, rosáceos y grises dan una personalidad muy femenina a toda la casa y logran una mezcla de elegancia y relajación perfecta para una casa de verano.
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‘Made in’ FilipinasDaniela se ha empleado a fondo con las lámparas de la casa: la mayor parte proceden de Filipinas, de donde es originaria su madre y donde vive actualmente su hermana y parte de su familia: «Solemos visitar la isla al menos una vez al año. Me siento muy cercana a ese país, por eso quise poner algún toque de mobiliario filipino: una mesita, la silla de mi cuarto y las lámparas son de allí. Dan muy poca luz y me recuerdan mucho a la atmósfera que se vive en las islas.»