Bienvenidos al paraíso

Los contrastes de color llenan el barrio colonial de la ciudad de Santo Domingo.

Un momento único: la caída del sol frente al mar.

Hay que probar los platos locales, muchos de ellos compuestos por arroz, maíz y la rica fruta tropical que por allí abunda.

Situado en la Plaza de Armas, o Plaza Mayor, de la capital dominicana, este edificio, construido a principios del siglo XVI, fue el primer ayuntamiento de América.

Tomarse una bebida local en alguno de los bares con encanto situados en la playa es un momento muy placentero.

Es uno de los monumentos más visitados de Santo Domingo. Fue levantada por los españoles para proteger la ciudad de los piratas y de los conquistadores.

Los turistas aprecian las espectaculares charcas naturales con vistas que se forman.

Instalaciones en la playa Las Terrenas, en la península de Samaná.

Las playas formadas por corral inmaculado, palmeras inmensas y agua cristalina se han hecho mundialmente famosas. Y las imágenes no engañan, son realmente paradisíacas.

Espectaculares vistas sobre el río Chavón, en Bayahibe, que discurre por una garganta tapizada con vegetación tropical.

La mayoría de los resorts comunican sus instalaciones con el mar. Con cientos de kilómetros de costa, es un buen destino para practicar deportes náuticos.

Los contrastes de color llenan el barrio colonial de la ciudad de Santo Domingo.

Es un Paraíso caribeño situado en una de las mejores playas vírgenes de la isla. Dispone de un soberbio spa, restaurantes de alta calidad y una marina para actividades acuáticas de todo tipo.

Uno de los souvenirs más aclamados son los cuadros pintados por artistas locales, de importante colorido y que representan escenas de la vida cotidiana de los dominicanos.

Esta isla, situada frente a la Romana, es una reserva natural protegida. Sus construcciones, respetando el entorno, tienen el encanto y color caribeños.

Los fondos de coral de las cristalinas aguas del caribe son ideales para la inmersión.

El skyline de la capital nos muestra que posee grandes rascacielos. En el malecón se concentran muchos de los mejores lugares de ocio.

En este suntuoso edificio se encuentra la residencia del Presidente de la República. Además, acoge las grandes celebraciones de la nación.

El Hotel Resort Casa de Campo, en La Romana, es el perfecto refugio para los que buscan reponer fuerzas.