La tradición que la reina Letizia deja atrás y que marca un antes y un después en su reinado

La agenda de los reyes de España nos ha dejado esta semana un detalle llamativo y que está generando muchos comentarios. Ayer se entregaron en Madrid los Premios Francisco Cerecedo, un galardón periodístico en el que se reconoce a los profesionales que han destacado por su trabajo periodístico y de divulgación. Además, se cumplía su 40ª aniversario, por lo que la expectación era máxima, especialmente por ver a Don Felipe y Doña Letizia que, un año más, acudieron puntuales y muy cariñosos a esta cita.

En el hotel del centro de la capital donde se celebraron estos premios, los monarcas estuvieron rodeados de personalidades dedicadas al sector de la comunicación, como el escritor David Trueba y el periodista Rubén Amón, y además, entregaron el Premio de Periodismo al ganador de esta edición, Carlos Alsina, el director y presentador del programa 'Más de uno', en Onda Cero. Pero más allá de esto, lo que más nos llamó la atención fue que la reina Letizia dejaba atrás una importante tradición, que había mantenido en anteriores ediciones, y donde deslumbró una vez más con su elegancia y estilo.

La reina Letizia deja atrás una tradición e innova con su look

Durante años, para esta cita periodística, la reina Letizia había optado (casi) siempre por el color negro, a excepción de 2017, cuando eligió un minivestido blanco de Teresa Helbig que dio muchísimo que hablar. Sin embargo, en esta ocasión, la mujer de Felipe VI se decantó por un look antagónico, rompiendo la 'tradición' y eligiendo de su fondo de armario un traje blanco de Hugo Boss compuesto por una blazer entallada en la cintura con hombreras que combinó con un top con puntilla de estilo lencero y del mismo color del traje, así como un pantalón de cintura alta y con caída.

Mención especial también para sus accesorios. Los zapatos que lució doña Letizia eran de una de sus marcas favoritas, Magrit, y de un color que combina muy bien con el blanco, que es el dorado. Además de esto, lució un bolso de mano a juego y de estilo cartera, y como joyas, escogió unos pendientes de diamantes con forma de flor de los que cae una perla y cuyo origen se desconoce.

Un traje blanco similar al de su pedida en 2003

Esta cita de los reyes con la prensa es una de las favoritas de doña Letizia, y por eso siempre suele lucir algunos de sus estilismos más espectaculares. Aunque lo más anecdótico del look de anoche es que nos recordaba a otro de los más emblemáticos, y que no es otro que el que eligió en su famosa pedida de mano en 2003.

Un impoluto traje blanco de pantalón recto, de Armani, que combinó con unos salones negros, y que pasará a la historia de la monarquía por el significado tan especial que tiene para ella. De hecho, solo hace unas semanas, su hija mayor, la princesa Leonor, le rindió homenaje en el día de su 18 cumpleaños luciendo también un traje blanco impoluto y sencillo hecho a medida en la sastrería Serna.

Se nota que la reina Letizia se siente muy cómoda entre sus antiguos compañeros de profesión y por eso no ha dudado en presentarse en esta ceremonia con algunas de sus apuestas estilísticas más arriesgadas.