Rihanna en la Super Bowl: anuncia su embarazo en un impactante show de 13 minutos de éxitos

Parecía que no iba a llegar nunca y, al final, podemos decir que hemos visto a Rihanna romper en dos (además que, literalmente) la Super Bowl, que este año ha enfrentado a los Philadelphia Eagles y los Kansas City Chiefs en el estadio de Glendale (Phoenix, Estados Unidos). Y es que la actriz, encargada de la actuación intermedia del partido, ya ha pasado a la historia por ser la encargada de una de las actuaciones más memorables de este evento, que ha aprovechado para revelar que está embarazada por segunda vez.

La expectación estaba servida, puesto que la artista es una gran maga del misterio, a la vez que encargada de algunas de las revelaciones más impactantes del mundo 'gossip'. Si pensábamos que aquello de dar a conocer al mundo que estaba esperando a su primer hijo con una prominente barriga fuera en mitad de una helada neoyorquina en enero del año pasado, no se ha quedado corta con el anuncio de su segundo embarazo, para el que se ha servido de miles de cámaras y espectadores.

"Cuando eres madre sientes que puedes conquistar el mundo y que puedes hacer cualquier cosa", insistió la artista días antes del evento en una rueda de prensa ofrecida junto a Apple Music, plataforma patrocinadora de la final del campeonato de la liga nacional de fútbol estadounidense. Eso lo ha venido a demostrar desde el mismo inicio de su número, que ha arrancado con 'Bitch Better Have My Money', con la que ha arrancado enfundada en un body rojo, con látex en la zona del pecho, un mono de tipo industrial con cinturón y la zona superior desabrochada y guantes a juego.

Las prendas, hechas a medida por Jonathan Anderson para Loewe, se inspiran en las indumentarias de vuelo y han sido diseñadas para crear volumen al ritmo de la dinámica coreografía del espectáculo, que supone la primera gran aparición de Rihanna tras un paréntesis de 6 años.

La de Barbados ha acompañado su look con algunos de los pendientes de Alta Joyería más atrevidos de Messika París, como el monopendiente Illusionnistes que se descompone en tres partes, el clip de diamantes Equilibristes, el monopendiente Magnetic Love, el pendiente Diamond Equalizer y el clip de diamantes Illusionnistes.

Subida a una gigantesca plataforma móvil, la cantante, de 34 años, ha puesto en evidencia que estos años alejada de los escenarios se han convertido en una eternidad, pero que la espera ha merecido la pena solo por los 13 minutos 51 segundos que ha convertido el 'Half Time Show' en una auténtica bomba de relojería. Acompañada por decenas de bailarines vestidas de blanco y con capucha, ha hecho evidente que cualquier 'show' se le queda pequeño con una coreografía precisa y perfecta. Lógico que las ovaciones y los aplausos no cesaran.

Tras descender levemente hasta casi la altura de sus acompañantes con 'Where Have You Been', Rihanna ha vuelto a ascender a los cielos sin ningún tipo de vértigo con 'Only Girl (In The World)' , para arrancar con 'We Found Love' sin dejar de moverse, a pesar de lo que parece un avanzado estado de gestación, eso tan solo nueve meses después de haber dado a luz a su primer hijo, fruto de su relación con A$AP Rocky. En este 'medley' también han tenido cabida temas como 'Rude Boy', 'Work', 'Wild Thoughts' y 'Run This Town'.

Mientras los bailarines no hacían más que multiplicarse tanto en las plataformas como en el césped y tras la introducción de unos coristas muy necesarios en la esperadísima 'Umbrella', Rihanna ha terminado por colocarse un impresionante abrigo largo y con capa a juego con el resto de su atuendo para cerrar su número con 'Diamonds In The Sky', canción para la que también ha habido tiempo para acariciar su tripita y, cómo no, ascender de nuevo al techo de un estadio que no cabía en sí de excitación. IMPRESIONANTE.