Estos son los exigentes retos a los que se enfrentará la princesa Leonor durante los próximos meses

La vida de la princesa Leonor está, de nuevo, volcada en su formación militar. La heredera al trono está totalmente integrada en la Academia Militar General de Zaragoza, en la que ingresó el pasado mes de agosto, y, aunque no disfruta de ningún privilegio, sí que sigue un programa adaptado que le permitirá completar sus estudios, pasando por los tres ejércitos, en tres cursos.

Justo antes de las vacaciones de Navidad, por ejemplo, pudimos ver a la hija mayor de los Reyes de España esquiando en las pistas de Astún, donde unos 160 estudiantes recibieron formación militar sobre la nieve como broche de oro al 2023. Y, ahora que ha arrancado el nuevo año, tiene nuevos y emocionantes retos en el horizonte. Eso sí, su reincorporación a la actividad será gradual hasta el 3 de febrero, fecha en la que, junto a sus compañeros, se someterá a un nuevo periodo de instrucción que se extenderá hasta el 9 del mismo mes. Durante esa semana, la princesa Leonor afrontará actividades físicas de alto nivel de resistencia y cansancio, similares a las que se enfrentó al llegar a Zaragoza el pasado año.

¿A qué retos se enfrenta la princesa Leonor los próximos meses?

Como os decimos, la próxima fecha marcada en su agenda ‘escolar’ será la semana del 3 al 9 de febrero, durante la cual está previsto que retome las maniobras en el campo de San Gregorio y las prácticas en el Pirineo oscense. De esta forma, todos los cadetes deberán ajustar nuevamente su rutina para adecuarla a las demandas del campo de entrenamiento. Entre esos retos están la restricción del uso del teléfono móvil para asegurarase de que están absolutamente concentrados en las actividades físicas organizadas en San Gregorio. Según algunas fuentes consultadas por Vanitatis, durante este tiempo, los cadetes estarán "desconectados" y su vida fuera de la academia será distinta: "Vives en el campo y no pisas la academia".

Sus días estarán centrados en ejercicios tácticos, prácticas de manejo de armas, formaciones, entrenamiento físico, orientación en el terreno y simulacros de situaciones de combate. Y, llegado ese momento, es posible que tengamos nuevas imágenes de la princesa Leonor con el uniforme de invierno, el casco y los esquís.

Una dieta estricta y hecha a medida

Según explican en Vanitatis, la alimentación durante los días de maniobra difiere de la que los cadetes suelen tener en la academia. De esta forma, dejarán de lado los servicios tipo bufet ofrecidos por el centro militar, que incluyen dos platos, pan, bebida y postre (con fruta, yogur o helado). En su lugar, se alimentarán con las conocidas raciones de combate: pequeñas cajas de comida envueltas en una bolsa opaca de color caqui, adornada con el distintivo de las Fuerzas Armadas y con un peso aproximado de 700 gramos, como hicieron en su primer periodo de maniobras.

Cada cadete recibe tres de estas cajas diariamente: una para el desayuno y las otras dos, diferenciadas con las letras A y B, pueden ser consumidas y alternadas según la conveniencia de cada joven militar. Estas raciones están diseñadas para proporcionar la nutrición necesaria durante operaciones en el campo, incluyendo alimentos de larga duración y fácil preparación, mediante una simulación de hornillo, como raciones de carne, embutidos, galletas, enlatados, barras energéticas y bebidas isotónicas. El objetivo es ofrecer una dieta equilibrada y energética que sea fácil de transportar y consumir durante situaciones operativas, sin privilegios alimenticios.

Más adelante, y según figura en la web del Centro Universitario de Defensa, la princesa Leonor tendrá otras dos semanas de instrucción, concretamente del 11 al 24 de marzo (con ambos fines de semana incluídos). El final de curso llegará en los primeros días de julio, ya que se espera que la entrega de despachos se realice el 3 o el 4 de ese mes.

En ese momento, la princesa Leonor será nombrada alférez alumna y pondrá fin a su etapa en Zaragoza y su estancia en el Ejército de Tierra. A continuación cursará su segundo año castrense (2024-2025) en la Escuela Naval de Marín en Pontevedra.