Esto es lo que ha decidido el juez sobre la denuncia de Clara Chía y Gerard Piqué contra un fotógrafo

Hay sentencia. La batalla judicial que iniciaron Clara Chía y Gerard Piqué contra Jordi Martín, el fotoperiodista del corazón cuyo trabajo ha incluido, en los últimos tiempos, cubrir la información sobre la vida de Gerard Piqué —ya sea junto a Shakira, ya sea con Clara Chía—, y que obtuvo la primera imagen que se divulgó de la catalana junto al deportista, ha tenido consecuencias, y no precisamente favorables para el reportero.

Según el auto, que ha sorprendido a algunos, el paparazi Jordi Martín no podrá ponerse en contacto con Clara Chía ni acercarse "a menos de 400 metros de su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro en que se encuentre". Hay una excepción: los actos sociales a los que concurran los dos (en este caso, deberá mantener una distancia con ella no inferior a 20 metros).

La medida, que tampoco cumple con todo lo solicitado por la pareja de Piqué, tiene, sin embargo, una caducidad: solo será durante tres meses.

¿Por qué denunció Clara Chía?

Esto llega después de que el 10 de mayo la pareja interpusiera una denuncia por un delito de acoso contra Jordi Martín ante los Mossos de'Esquadra. Después, ambos declararon ante un juez y explicaron que unos días antes, el día 4 del mismo mes, el fotógrafo les había seguido hasta un aparcamiento privado en Barcelona que pertenecía a la empresa de Piqué (Jordi sostuvo que no hizo allí ninguna foto porque un vigilante le indicó que estaba prohibido). También indicaron que llevaban meses siendo perseguidos por él y que su seguimiento no había cesado ni ante la boda de un amigo del deportista o la casa de los padres de Clara Chía. En una ocasión, para no perderlos, había conducido un coche a gran velocidad.

Clara Chía alegó que todo esto le había provocado "sufrimiento" y estrés por el comportamiento "agresivo y agobiante", también provocador, invadiendo su espacio personal, del trabajador, y que se encontraba en una "situación límite".

También se lamentó de que ya no podía salir a comer al mediodía con sus compañeros de trabajo, que la situación le había obligado a perder el contacto con sus amigas de antes y que le era muy difícil reunirse con su familia o ir al gimnasio.

La razón a Clara Chía, pero solo a medias

Por todo ello, la novia de Piqué solicitó, en un primer momento, una orden de alejamiento de 3.000 metros, que luego redujo a 1.000. También Piqué la solicitó, pero finalmente la retiró. En su caso, la fiscalía señaló que no veía un indicio de delito de acoso y debía prevalecer el derecho de la información, pues Piqué era una figura pública internacional. En el caso de Clara Chía, sin embargo, la cosa cambiaba porque ella había sido conocida no por ser una figura pública, sino por su relación con el jugador, se indicó.

Por todo ello, el juez atendió el alejamiento pero redujo la distancia solicitada por Clara Chía a 400 metros y puso el límite de los tres meses, tiempo en el que estimó que la pareja no despertaría ya tanto interés mediático.

En los últimos días, el perfil de Instagram de Jordi Martín ha recibido numerosos apoyos (200.000, contabiliza el paparazzi) y, también, críticas.