Qué son los exosomas y por qué son el tratamiento de belleza más deseado en todas las edades

Hace muchos años que se investiga sobre su poder regenerativo, pero no ha sido hasta ahora cuando han empezado a usarse en la medicina estética.

Qué son los exosomas
Qué son los exosomas / Istock

Aunque se descubrieron hace 15 años, es ahora cuándo los exosomas han despertado el interés de la comunidad científica y médica debido a su gran poder regenerativo: “son estructuras diminutas en forma de vesículas que contienen proteínas de las células, así como porciones de ADN y ARN que son excretadas por las células, y ofrecen mejores resultados regeneradores que el plasma rico en plaquetas (PRP)”, asegura la doctora Virtudes Ruíz, cirujana y médico estético.

Sus beneficios son muchos, y por eso no nos extraña que en poco tiempo se hayan convertido en el tratamiento estrella por el que todo el mundo pregunta. “Ayudan a revitalizar la piel de cara, cuello y escote, a activar la producción natural de colágeno y elastina, a reducir las manchas, las arrugas y las secuelas de acné”, asegura la doctora María Vicente, cirujana y médico estético. Y también tienen aplicación en cuero cabelludo y zona íntima.

¿Cómo se pueden aplicar los exosomas? 

Se pueden aplicar de forma tópica y también con micro-agujas (Dermapen), de este modo aumentamos su capacidad de penetración y su acción regenerativa, al llegar a capas más profundas de la piel, donde tienen que realizar su función regenerativa”, asegura la doctora Ruíz. Si se combinan con PRP o células madres, se consigue una sinergia y mejores resultados. Los exosomas regeneran rápidamente la epidermis, eliminan rojeces y los pequeños daños que se producen en la piel tras los procedimientos de inyección médico estéticos, por lo que además nos estarán ayudando a que la piel se recupere mucho antes.

¿Cómo se pueden utilizar los exosomas en una crema? 

La forma tópica fue su primera aplicación y donde se realizaron los primeros estudios, que llevan ya unos 15 años, y se puede optar por ella en muchos casos. De hecho, se les da a los pacientes para su tratamiento domiciliario, tras los tratamientos en consulta y para mejorar los resultados de cualquier terapia regenerativa. 

“Hay que tener en cuenta que penetran un poco menos que cuando se aplican con micro-agujas, ya que no están penetrando directamente en el tejido dañado. Sin embargo, en muchas ocasiones, podemos recomendar la vía tópica dependiendo de los pacientes y lo que estamos tratando”, comenta Virtudes Ruíz.

“A nosotras nos gusta utilizarlos tras los tratamientos con láser de rejuvenecimiento o terapia fotobiodinámica. En estos casos, dependiendo del tipo de paciente, los aplicamos tópicamente en muchas ocasiones para mejorar los resultados de regeneración y rejuvenecimiento, y sobre todo para eliminar inmediatamente las rojeces que pueden quedar tras estos tratamientos, particularmente en los meses de verano, ya que tanto la piel como el paciente lo agradecen infinitamente. También los aconsejamos tópicamente tras una exposición larga al sol que haya tenido mucho enrojecimiento e incluso quemaduras de primer grado (sin llegar a tener ampollas)”, detalla la doctora Vicente.

Síguele la pista

  • Lo último