Rosamund Pike ha llevado ese diseño por el que morirás si te casas y eres clásica pero con un toque moderno, un vestido de novia que es pura fantasía

Las alfombras rojas y 'photocalls' de los últimos tiempos se han convertido en todo un desfile de vestidos de novia. Los Premios Goya, donde más de una decena de actrices optaron por 'total whites', fueron solo un aviso de lo que más tarde ocurriría en los Oscar y el resto de eventos señalados de la temporada.

Ahora, la última en ponerlo en práctica ha sido la actriz Rosamund Pike, que ha acaparado todos los flashes este lunes en el estreno en París de la película 'Radioactive', en la que da vida a la científica Marie Curie, con el traje nupcial que adorarán las novias clásicas... pero con un toque moderno.

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La intérprete es toda una experta en la materia, pues la mayoría de sus apariciones en la 'red carpet' tienen como punto común la apuesta por vestidos blancos, perfectamente aptos para caminar hacia el altar.

Sin embargo, en esta ocasión Rosamund le ha dado una vuelta de tuerca a la estética 'bridal' tradicional eligiendo un conjunto compuesto por un abrigo largo y un minivestido tipo blazer que pertenece a la última colección, también teñida de blanco, de Alta Costura de Givenchy.

Las grandes solapas del vestido, el volumen en los hombros y la caída del abrigo como si de una capa de princesa se tratara hacen de este diseño el sueño de muchas futuras novias; y el resultado no puede ser más sofisticado y original.

Para cederle todo el protagonismo al look, la protagonista de 'Perdida' (proyecto que le valió la nominación a mejor actriz en los Oscar, los Globos de Oro y los BAFTA en 2015) ha prescindido de accesorios o joyas llamativas, de manera que solo unas sandalias de tacón complementan el 'outfit'. ¡Sí quiero!