Nadie se dio cuenta de lo que le ocurría a Amaia Montero al cantar Rosas con Karol G, pero sus fans se lo perdonan

Fue, sin duda, uno de los momentos más emocionantes de los cuatro conciertos que la artista Karol G ofreció (y llenó) en Madrid: la actuación sorpresa de Amaia Montero, que tras dos años alejada del foco mediático y de los escenarios, se subió al del Santiago Bernabéu para interpretar 'Rosas', uno de los grandes éxitos de su carrera y el tema que desde entonces se ha hecho viral, mientras Karol G sonreía y la animaba a su lado.

"Ha sido un momento tan importante y tan impactante, después de tanto tiempo sin pisar un escenario y, sobre todo, después de mucho tiempo pensando que jamás volvería a pisar un escenario", dijo Amaia, cuya salud mental y física, que protagonizó noticias sobre ingresos hospitalarios, tuvo mucho tiempo en vilo a sus seres queridos y seguidores.

La exvocalista de La Oreja de Van Gogh brilló sobre la plataforma central del estadio, rodeada por un misterioso humo blanco y ataviada con un minivestido blanco con vuelo de una de las marcas favoritas de la reina Letizia, acompañado por altísimos tacones. Y parecía pletórica y como si el tiempo no hubiera pasado por ella, como han apuntado muchos de sus seguidores mientras interpretaba una de sus composiciones más queridas.

"Hoy es un día increíble para mí y ha sido de la mano de Karol y no ha podido ser más bonito. Este momento lo voy a guardar en mi corazón y en mi alma", concluyó la artista, que accedió a cantar por petición expresa de Karol G, una gran fan de la cantante de 'El viaje de Copperpot', 'Lo que te conté mientras te hacías la dormida' o 'Guapa', temas todos ellos con los que había crecido.

El gesto de Amaia Montero en el concierto de Karol G

Aunque son muchos los que han calificado la actuación de Amaia Montero de "regreso triunfal" (y, de hecho, la artista planea volver a la música, como explicó un día después) y la vasca demostró estar en forma y preparado para ello, hay un detalle que revela las sensaciones que vivió Amaia Montero en el concierto. Nos referimos al temblor de la mano con la que agarraba el micrófono y que no cesó a lo largo de todo el tema, una señal de, seguramente, la emoción que la atravesaba por dentro pero tal vez también de los nervios que la suponían enfrentarse de nuevo a un auditorio, consciente de que aquello podía determinar, incluso,su próximo paso vital, como si se tratara de una evaluación personal.

Poco antes de actuar, Karol G ya había advertido de que iba a aparecer una persona que llevaba "dos años sin subirse a un escenario". "Hoy tengo aquí a una personita que lleva dos años sin subirse a un escenario y está nerviosa, pero ustedes le van a regalar una de las mejores noches de su vida”, adelantó.

Por las palabras de Amaia Montero sabemos que el vaticinio de Karol G se cumplió y no solo el público terminó encantado, sino también ella: "La vida tiene un montón de maneras de hacerte llegar su mensaje, sólo tienes que estar muy atento a ella y entonces es como montar en bicicleta. De repente te das cuenta de que es tan fácil como mirar hacia adelante sin mirar al suelo y entonces entiendes que la vida es el viaje y no el destino”, reflexionaba después en Instagram junto a un álbum de la actuación y un conmovedor abrazo a ‘La Bichota’.