La visita sorpresa del rey Felipe VI a Medinaceli: comida con amigos y paseo por el casco antiguo

Las salidas inesperadas de la Familia Real son cada vez más frecuentes. Fue la reina Letizia la protagonizaba una el pasado viernes 2 de febrero, cuando aprovechó que tenía la agenda despejada de compromisos oficiales para asistir a un encuentro con Martin Scorsese en la Academia de Cine, un acto que no figuraba en la agenda de la Casa Real y al que solo está permitido que acudan académicos. Por su parte, el rey Felipe VI también ha protagonizado una aparición pública imprevista durante este pasado fin de semana.

A medio camino entre Zaragoza y Madrid se encuentra el municipio soriano de Medinaceli, el destino que ha visitado por sorpresa el monarca y que ha sorprendido a los vecinos de dicha localidad. Un localidad declarada Conjunto Histórico Artístico en 1964 y galardonada con el Premio Municipio Turístico de la Provincia de Soria en dos ocasiones. Fue concretamente el sábado 3 de febrero cuando se pudo ver al rey Felipe VI paseando por las calles de Medinaceli, una aparición que no estaba prevista en su agenda oficial y que, por tanto, y según han informado varias fuentes a EFE, se trataba de una visita privada. Según se ha especulado, es probable que el rey Felipe VI visitara a su hija, la princesa Leonor, que se encuentra actualmente en la Academia General Militar de Zaragoza.

Vestido como un paisano más con pantalón gris, jersey azul y chaleco negro, el rey Felipe VI disfrutó de una comida con amigos en 'El Cielo de Medinaceli', uno de los reconocidos restaurantes que conforman la oferta gastronómica de la localidad.

Tras ello, el monarca paseó por las calles del casco histórico de la localidad, visitando los monumentos más reconocidos y todo ello acompañado de su habitual equipo de seguridad. Fueron entonces muchos los ciudadanos que aprovecharon el momento para acercarse a él y pedirle una fotografía, a lo que Felipe respondió con total amabilidad.

Esta aparición sorpresa se ha dado tan solo unos días después de que el rey Felipe VI haya celebrado su 56 cumpleaños. Durante ese día, que fue concretamente el 30 de enero, el monarca no despejó su agenda oficial, teniendo así que presidir tres audiencias en el Palacio de la Zarzuela.

Es probable que, por ello, haya querido aprovechar el fin de semana para realizar una escapada y desconectar antes de afrontar otra semana llena de compromisos oficiales; pues son tres los que tendrá de aquí al viernes 9 de febrero, aunque todos ellos en Madrid.