Tras superar el cáncer de mama, a Sarah Ferguson le han diagnosticado cáncer de piel

La duquesa de York se ha quitado un lunar que ha resultado ser un melanoma maligno.

Sarah Ferguson en la boda del Príncipe Harry y Meghan Markle
Sarah Ferguson en la boda del Príncipe Harry y Meghan Markle / Gareth Fuller

A mediados del año pasado nos enterábamos de la noticia: Sarah Ferguson había sido operada, con éxito, de un cáncer de mama. La ex mujer de Andrés de Inglaterra recibió el alta hospitalaria tras su intervención y se recuperaba en Windsor con el apoyo del hermano de Carlos III y de sus dos hijas, Beatriz y Eugenia. Fue un portavoz de la ex duquesa de York el que ha envió un comunicado a los medios británicos para explicar su dolencia.

Al parecer, Sarah Ferguson acudió a una revisión rutinaria y, tras una mamografía, los médicos le dieron el diagnóstico y le recomendaron someterse a una operación que tuvo lugar en el hospital King Edward VII, en el centro de Londres. "Ha sido un momento difícil, pero está muy agradecida al personal médico que realizó la mamografía y al personal médico que la atendió estos últimos días, está increíblemente agradecida", se podía leer en el comunicado que hizo público la prensa británica.

En dicho comunicado, Sarah Ferguson también quiso dejar claro la importancia de realizarse revisiones periódicas ya que su cáncer de mama no presentaba síntomas.

Sarah Ferguson en el Festival de Venecia 2022.

Sarah Ferguson en el Festival de Venecia 2022.

/ Kate Green

Sin embargo, ahora crece la preocupación en el entorno de la duquesa de York, ya que ha sido diagnosticada de un melanoma maligno tras la extirpación de un lunar canceroso durante el tratamiento del cáncer de mama. “Tras su diagnóstico de una forma temprana de cáncer de mama este verano, se le ha diagnosticado un melanoma maligno”, ha informado su portavoz. “Su dermatólogo pidió que le extirparan y analizaran varios lunares al mismo tiempo que la duquesa se sometía a una cirugía reconstructiva después de su mastectomía, y uno de ellos ha sido identificado como canceroso”, añade.

Por supuesto, sus médicos están analizando todo para asegurarse que esto se haya detectado en las primeras etapas, pero la noticia ha sido como un jarro de agua fría para Sarah Ferguson y su familia, aunque se mantienen positivos. "Ha sido angustioso, pero la duquesa sigue de buen humor”.

Sarah Ferguson y sus hijas siempre han estado muy involucradas en la lucha contra el cáncer. Fue hace un año cuando la duquesa de York, junto con Eugenia y Beatriz, participó en una videollamada con 'Teenage Cancer Trust', la única organización benéfica del Reino Unido dedicada a mejorar la calidad de vida y las oportunidades de recuperación para los jóvenes con cáncer de edades comprendidas entre los 13 y 24 años. De hecho, sus fundadores, el Dr. Adrian Whiteson y Myrna Whiteson, le agradecieron su trabajo con la organización durante sus 32 años.

También es cierto que siempre ha sido una mujer optimista y que ha mostrado su apoyo a su exmarido, el príncipe Andrés, del que se divorció en 1992 pero al que siempre ha permanecido muy unida (ni siquiera el escándalo Epstein ha conseguido separarles). La madre de las princesas Beatriz y Eugenia estuvo siempre sometida al escrutinio en el seno de la familia real, también al del pueblo y la prensa británicos, desde que anunciara su compromiso con Andrés de Inglaterra en 1986. Una presión similar a la que sufría por entonces Diana de Gales y que ella ha contado en más de una ocasión. Sea como fuere, lo que nadie le puede negar a Sarah Ferguson es que siempre ha afrontado sus cuestiones personales de frente y prueba de ello es que hace dos años contó a la revista People sus problemas de salud mental derivados de la crueldad de los tabloides británicos hacia ella.

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