Kate Middleton no quería ser una mantenida: salen a la luz sus exigencias para formar parte de la familia real británica

La boda real entre el príncipe Guillermo y Kate Middleton se celebró en la Abadía de Westminster el 29 de abril de 2011. Una fecha inolvidable para la princesa de Gales que, lamentablemente, está atravesando unos momentos complicados desde que anunció que padecía cáncer el pasado mes de marzo. Desde entonces la hemos podido ver en contadas ocasiones, ya que la esposa del futuro rey de Inglaterra está centrada en su recuperación y en permanecer junto a sus seres queridos.

Pero es ahora cuando han salido a la luz algunas noticias relacionadas con la vida de Kate Middleton antes de convertirse en princesa y que tienen que ver con las condiciones que, al parecer, puso a la familia real británica para casarse con el príncipe Guillermo. Según publican algunos medios, Kate Middleton se negó a conformarse con la tradición y estableció sus propias reglas.

Las condiciones de Kate Middleton para casarse con el príncipe Guillermo

El 29 de abril de 2011, la vida de Kate Middleton sufrió un giro de 180 grados al convertirse en miembro de la familia real británica, lo cual, no solo implicaba un título, sino también una serie de responsabilidades reales. Sin embargo, la princesa estaba decidida a establecer unos límites antes de asumir completamente su rol real.

En su libro "Catherine, la Princesa de Gales: La Biografía", su autor, el periodista, escritor y locutor británico Robert Jobson, revela que Kate estableció algunas reglas fundamentales, como que no sería encasillada a la hora de llevar a cabo ciertos deberes "e insistió en disfrutar de su baja de maternidad, lejos de los medios y de la opinión pública". Jobson afirma que Kate Middleton dejó claro a los altos miembros de la realeza que su objetivo principal era lograr un equilibrio entre llevar a cabo deberes reales y mantener una vida familiar feliz.

Kate Middleton, una madre a tiempo completo y comprometida con sus tres hijos

"Esto no significaba que no llevaría a cabo deberes reales", aclaró Robert Jobson. "Pero quería ofrecer su imagen solo a organizaciones benéficas cercanas a sus intereses y profundizar en ello antes". De hecho, a principios de 2015, mientras estaba embarazada de la princesa Charlotte, el príncipe Guillermo presentó un conjunto de "condiciones" a la reina Isabel y al entonces príncipe Carlos en nombre de su esposa, expresando su deseo de tener más espacio para desarrollarse en su rol de princesa y la necesidad de más tiempo para aclimatarse a las complejidades que conlleva la vida real.

Desde entonces, Kate no solo ha cumplido con sus deberes como miembro importante de la realeza, sino que también ha sido una madre a tiempo completo y comprometida con sus tres hijos. Ademas, es reconocida por su papel como mediadora entre su esposo y el rey Carlos, lo que ha permitido mejorar enormemente la relación entre padre e hijo tras años complicados.