Bárbara Rey: "Lo que me hizo el rey Juan Carlos, hoy se llamaría acoso"

La expectación era máxima: este lunes, 9 de diciembre, Telecinco comenzaba a emitir un adelanto del especial 'Bárbara Rey: Mi verdad', un espacio en el que la vedette había prometido abordar "sin censura" y con mucha verdad ("no pienso callarme nada", dijo) los episodios más controvertidos de su vida (y entre los que figuraba su romance con el rey emérito, Juan Carlos, sus distintos amores o el conflicto que la enfrenta con su hijo, Ángel Cristo).

Ahora ya conocemos algunos de esos pasajes [en el vídeo, a continuación] de ese espacio que se ha grabado a tavés de una entrevista de 20 horas y en la que Bárbara Rey cuenta a Santi Acosta cómo era su relación con el rey, el motivo por que el esta se terminó, cómo se condujeron los que en aquel momento desempeñaban los puestos más importantes de la Casa Real (Sabino Fernández Campo) y cómo lo vivió con la reina Sofía.

En el espacio también interviene, como presentadora, Beatriz Archidona y cuenta con testimonios de Alessandro Lecquio, Ángela Portero, Kike Calleja, Terelu Campos y Sandra Aladro.

"Yo no lo llamaría chantaje, lo llamaría préstamo"

"Yo no lo llamaría chantaje; lo llamaría préstamo y lo volvería a hacer", se oye decir a Bárbara Rey para justificar que decidiera grabar sus encuentros con el rey y pedirle dinero por no emitirlos. En la cinta también relata cómo se veía con el rey en una casa que luego descubrió que "era un un picadero", es decir, un chalé que mantenían algunos hombres supuestamente casados para poder tener intimidad extramatrimonial con tranquilidad.

"En algunos casos he ido con mi coche y he dejado el coche al final de la calle, allí no había absolutamente nadie", señala la actriz, que también indica que la pareja dejó de verse en ese lugar cuando descubrieron que habían instalado cámaras dentro de la casa y grababan todas sus conversaciones y "todo lo que se hacía" allí. Entonces, el rey emérito propuso a Bárbara Rey que se siguieran viendo en la casa de ella.

En el espacio, Bárbara Rey también reconoce haber sufrido mucho, llegando a caer en una "depresión muy grande".

"Me pude haber quedado embarazada del Rey desde el primer día", advierte en otro momento, insistiendo en que la única que ponía precauciones era ella antes de considerar que "lo que él (D. Juan Carlos) hizo conmigo antes se consideraría un honor; ahora, se llamaría acoso".

Cómo conoció al rey Juan Carlos

"Yo tenía una amiga del café teatro que se llamaba Charo y me dijo: "Te ha llamado el rey". Me puse al teléfono y dije; "¿Quién eres? Déjate de gili*olleces, anda ya", fue su respuesta cuando aquella persona insistía en que era el rey Juan Carlos de Borbón.

Relata cómo le dejó su teléfono para que le llamara y comprobara que era de Palacio de la Zarzuela.

Luego mantuvieron charlas telefónicas durante un mes, todos los días (incluso varias veces al día) antes de que protagonizar su primera cita. "Me llevó a Zarzuela. (...) Abre la puerta... y estaba guapo. No es que fuera Paul Newman, pero estaba guapo. A él le va a gustar escuchar eso".

"Antes de irme me dio un medallón con todos los signos del Zodiaco. Me pidió que no me lo pusiera porque la reina lo conocería (...). Cuando nos despedimos me dio un beso en la boca y me quedé un poco así, cortada".

Su primer encuentro sexual careció de romanticismo, fue en una habitación "de tipo castellano, en camas de hierro, feas". "Me hubiera gustado que hubiera tenido algún detalle, que hubiera sido más generoso... pero simplemente fue un poquito de conversación y cuando le pidió el cuerpo, me cogió de la mano y me llevó a la habitación".

"Era agarrado, nada generoso", subraya. "Yo soy imbécil en sentimientos y me fui haciendo ilusiones". También declara que supo que el rey había estado con otras famosas, como Nadiuska, la diva alemana de los 70.

"Él me trata como a una p*ta", añade al recordar que un día que el rey fue a su casa y "tras hacer el amor, por llamarlo de alguna manera" le dejó "500.000 pesetas (3.000 euros) en la mesilla".

"La reina Sofía sabe mejor que nadie cómo es él", añadía, antes de señalar que le habían dicho que la mujer del rey Juan Carlos sí estaba al tanto de su affaire.

El fin de su relación con Juan Carlos I

¿Por qué se produjo el final de esa relación? La decisión la tomó Bárbara Rey, cuando se enamoró "locamente" del domador Ángel Cristo y, al mes de iniciar una relación con él, este le propuso matrimonio.

"Después de pasar una mala racha, llegó él (Ángel Cristo). Un hombre que me quería y que no iba a esconderme. Cuando Ángel me pide matrimonio, llamé al rey para frenar los encuentros y no volví a tener contato con él". Este le dijo que se "alegraba".

Tal vez fue una "huida hacia adelante", reconoce ahora. Pero había encontrado un uhombre que la quería y ella "quería tener una familia", hijos. De esa manera, además, se acababa su relación con el monarca.

Luego, sin embargo, retomarían la relación con el soberano tras su divorcio, años más tarde.

El maltrato brutal de Ángel Cristo

Sí volvió a ver al rey emérito, sin embargo, antes de su boda en una ocasión más en la que no mantuvieron relaciones. El rey quería obsequiarle con un reloj de barco para su marido y le habla de seguir, algo a lo que se negó la artista (el rey, por su parte, no insistió más).

A Ángel Cristo nunca le contó lo que había sucedido con don Juan Carlos. "Dos cosas que le conté me costaron dos palizas. No podía contarle eso", ha explicado.

Antes de que se produjera el maltrato, Bárbara Rey asegura que se enamoró de Ángel Cristo por, entre otras cosas, lo bien que la trataba. "Me trataba tan bien. Era tan generoso".

La violencia de Ángel Cristo fue una de las causas que precipitó su divorcio. "Cuando estábamos separándonos, dos veces me violó", ha afirmado, rotunda.

Más tarde, asume que la educación que recibió de su madre era para que fuera una mujer servil, como era habitual en la época. Su madre tuvo problemas de salud y tenía comportamientos violentos, especialmente con la hermana de Bárbara. Ella decidió irse muy pronto de su casa, a los 18 (y no lo hizo antes porque su padre, una de las personas que más ha querido en el mundo, se lo pidió).

Nueva relación con el rey

Cuando Bárbara Rey y Ángel Cristo comienzan a tener graves problemas, la primera llegó a recurrir al rey pero no encontró apoyo en el monarca, cuyo único interés era "mantener relaciones sexuales". Al parecer, al soberano, según explica, no le impresionaban sus diferencias conyugales".

Retomaron su relación tras el divorcio de la actriz. Ella sufría graves dificultades económicas. No encontraba trabajo en ninguna serie. Llegó a pensar que en lugar de ayudarla, el rey disuadía a los directivos de las cadenas para que no la contrataron, tal vez porque a la reina Sofía no le apetecía encontrársela en la pantalla. Entonces dedició grabar sus encuentros para conseguir dinero. "Contactó con La Tienda del Espía. Vinieron a casa para instalar unos micrófonos y una cámara dentro de una tele. Yo tenía miedo, pero nunca llegó a darse cuenta".

Aquello, cuando se sospechó, le trajo consecuencias: "Mientras yo no estaba en casa aprovecharon para abrir la caja fuerte. Me rompieron la correa de la dirección del coche para perder el control del vehículo. Me querían matar", ha confesado la actriz, que había firmado un contrato por su discreción por cinco millones de pesetas mensuales (unos 30.000 euros).

“Yo no lo llamaría chantaje, lo llamaría préstamo. Y lo volvería a hacer. Tenía las fotos, necesitaba ayuda, si me llaman chantajista me da igual. Pero lo que sí tengo que aclarar es que a mí en la vida me han dado ese dinero que cuentan. Para nada, en absoluto. Él personalmente me da un dinero porque me puedo quedar sin casa al no pagar la hipoteca y para el colegio de los niños. Le entregué las fotos, pero yo me quedé con otras tantas”, declara la actriz, que se ha emocionado al rememorar las dificultades económicas por las que atravesó y que le hicieron temer por su casa mientras se llenaba de deudas.

Las graves acusaciones de su hijo

Su relación con grandes personalidades en las últimas décadas del siglo XX no es el único episodio sobre el que las preguntas se centran en este programa, que aborda con más amplitudtemas espinosos como las últimas acusaciones de su hijo, Ángel Cristo Jr., que ella ha respondido con una demanda millonaria por intromisión en su derecho al honor, la intimidad y la propia imagen.

"Se han servido informaciones falsas, insidias infamantes y vejaciones que atentan gravemente contra su honor, intimidad y propia imagen con el único objetivo de tratar de recuperar la hegemonía televisiva que habían perdido desde la cancelación de (...) 'Sálvame', y volver a alcanzar los índices de audiencia que ya solo estaban al alcance de la competencia", reza la demanda, de más de un millón de euros, a la que ha tenido acceso el portal.

El pasado mes de septiembre la revista holandesa Privé publicó unas fotografías en las que se ve al rey Juan Carlos muy cariñoso con la actriz Bárbara Rey. Ambos aparecen abrazándose y besándose. Al parecer, las fotos habían sido filtradas el medio por el hijo de la actriz española. Este sostenía que él era el autor de la foto, que su madre le había pedido que las hiciera en secreto cuando él tenía 13 años, en 1994, mientras que la actriz ha asegurado en el documental que las imágenes las tomó su hermana aunque en un momento dijo que había sido su hijo por evitar problemas.

Según la publicación neerlandesa, el hijo de la actriz mostró "cómo su hijo usó la relación con el exmonarca para estabilizar su situación económica" y "utilizó fotos comprometedoras para chantajear al rey y obtener ayuda financiera". Además, Ángel Cristo Jr acusaba a su madre de maltrato infantil.

Bárbara Rey, por su parte, acusa a su hijo de haberle robado material personal y niega que este fuera quien hizo las fotos.

Mientras, Sofía Cristo, hija del anterior y hermana de Ángel, ha mostrado su apoyo a su madre. "Todo lo que dice es mentira. Yo vivía en esa casa, he tenido mucho miedo y he vivido momentos terroríficos y no estaba mi padre", indicó. "Mi madre es una mujer maltratada. Tiene 74 años y no la dejan en paz ni la dejan vivir".