¿Cómo deben ser las mechas en el pelo rizado para que queden favorecedoras?

Las mechas son una técnica popular en el mundo de la belleza, diseñadas para aportar luz, dimensión y un toque personalizado a la melena. Sin embargo, es esencial reconocer que el enfoque para aplicar mechas en el pelo rizado cambia significativamente del de las texturas lisas. 

Del pelo rizado, es inconfundible su estructura única. A diferencia del cabello liso, que tiene una cutícula más compacta y resistente, el cabello rizado suele tener menos capas de cutícula que están más abiertas. Estas características lo convierten en un tipo de pelo más delicado y frágil, lo que significa que requiere una forma más cuidadosa a la hora de aplicar tratamientos químicos o decoloración.

Conchi Arias, fundadora de Campos Curlyhair y una eminencia en el cuidado del pelo rizado, explica que “al aplicar decoloración no es necesario usar una oxidación tan fuerte; una oxidación menos intensa puede lograr el mismo nivel de despigmentación”. 

Esto es crucial, ya que un producto demasiado agresivo puede comprometer la estructura interna del rizo. Los puentes internos del cabello rizado son más débiles debido a una alteración genética que causa un alineamiento incorrecto. Esto reduce la capacidad del cabello para resistir la ruptura, lo que hace imperativo que se utilicen métodos de aclarado más suaves.

La elección de la técnica más adecuada

Una de las técnicas más recomendadas para el pelo rizado es el ‘melting’. Esta técnica consiste en crear una transición suave y natural entre el color de la raíz y las puntas. Según Arias, la personalización es clave para sacarle el máximo provecho a esta técnica. 

“En las puntas, aplicamos una mayor cantidad de color para simular un efecto balayage; en medios utilizamos highlights difuminadas y en la parte superior aplicamos el color mediante la técnica melting”, explica. Este enfoque no solo resalta la belleza natural del cabello rizado, sino que también ayuda a minimizar la frecuencia con la que es necesario realizar las mechas.

Que NO elegir

Es fundamental evitar técnicas de color famosas en el pelo liso, como las babylights, ya que el resultado puede no ser el deseado. Las babylights están diseñadas para un efecto sutil en cabellos lisos, pero en los rizos, puede resultar en un look que no se aprecia del todo. “Lo que realmente necesitamos es potenciar el nervio del rizo para que dé mayor profundidad y luminosidad solo en el giro”, indica Arias.

Para obtener un resultado ideal, la técnica de ‘pintar el rizo’ es crucial. Esto implica observar cómo se forman los rizos y aplicar las mechas de forma estratégica en esos puntos específicos. Así se asegura que el color realce la forma natural del cabello en lugar de competir con ella.

¿Cuáles son los tonos de tendencia para las melenas rizadas?

En cuanto a los tonos, es importante elegir colores que no requieran decoloración excesiva, ya que esto puede dañar aún más la estructura de la fibra capilar. 

Los tonos que mejor funcionan en pelo rizado suelen ser los marrones, dorados y cobrizos. Según Conchi Arias, “estos tonos no requieren aclarar mucho el cabello, lo que ayuda a preservar más la estructura interna”. Además, estos colores aportan calidez y dimensión, elevando su apariencia de manera elegante.

Cuidados del pelo rizado con mechas

Una vez que se ha aplicado el color, el cuidado post-tratamiento es fundamental para mantener la salud del cabello rizado. Abrir la cutícula para introducir el color puede dejar el pelo más vulnerable. Por lo tanto, restaurar su estructura es clave. 

Los expertos recomiendan productos que ayuden a rellenar la estructura interna de la fibra y que además, retengan la humedad. Por ejemplo, la mascarilla Hydraqua, de CCH.

También es necesario reforzar y nutrir el pelo después de una coloración con productos de tratamiento que contengan proteínas y aminoácidos. 

Y si hay un producto que las chicas ‘curly’ no deben olvidar, es el acondicionador sin aclarado o “leave in”. Este tipo de producto aporta un extra de protección y suavidad a la cutícula, vital para mantener los rizos hidratados y manejables. Además sella la hidratación y actúa como un escudo protector.