¿Te gustan los vestidos de flores? Entonces este de Oysho te encantará

Que estemos a punto de adentrarnos en el otoño no quiere decir que no podamos seguir llevando estas prendas románticas que son todo alegría y buenas vibraciones en cualquier momento del año.

Instagram @tasana_korac

Tienen algo los vestidos de flores que los vuelve irresistibles. Puede que sea lo bucólico de su estampado o su carácter romántico pero lo cierto es que siempre terminas sintiéndote bien cuando llevas un diseño de este estilo. No importa para qué lo lleves ni cuando lo lleves, el efecto es siempre el mismo.

Y sí, has leído bien, el cuando tampoco importa demasiado. Ni en el contexto -hay modelos para bodas maravillosos como los hay ideales para disfrutar de una tarde de ocio entre amigos- ni la estación del año. La lógica puede llevar a pensar que solo funcionan en primavera pero de eso nada. En verano lo hacen igual de bien en sus versiones cortas y de tirantes hiperfrescas, en invierno los hay de manga larga y en tejidos como el terciopelo a los que es imposible resistirse y en otoño el abanico de posibilidades se abre porque hay espacio para utilizar todos esos con diferentes accesorios hasta dar con la combinación estrella.

Con botines y trench, con zapatillas y chaqueta vaquera, con bailarinas y blazer... solo es cuestión de probar. Pero antes de hacerlo necesitas encontrar un vestido que te permita hacerlo con genial resultado y este de Oysho lo hace.

La mejor prueba de que no entiende de temporadas esta creación es que pertenece a la colección que la firma tiene actualmente a la venta por 35,99 euros dispuesto a ser utilizado desde ya mismo.

Como ves su print de diminutas flores en tonos azules no puede ser más evocador, sobre todo porque a este se une el corte del diseño que es midi, con larga botonadura en la parte central bajo un escote de pico, con mangas fluidas, abertura en la falda y lazada a la altura de la cintura para permitir un mayor ajuste.

Oysho

Un modelo de estética vintage que Oysho ha declinado con un mismo dibujo en dos intensidades de azul, una más oscura y otra más clara, para que pueda ajustarse a los gustos de cada una y así poder encajar mejor los accesorios adecuados.

Una fórmula de lo más reinterpretable durante el entretiempo a la que merece la pena dar una oportunidad.